Rueda supera las 130.000 toneladas en la mayor cosecha de su historia

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen (DO) Rueda dio ayer por finalizada la campaña de vendimia, con una cosecha histórica de 130.551.186 kilos de uva. El marchamo de calidad, que superó la barrera de las 100.000 toneladas en 2016 (con 111.513, aunque en 2017 bajó a 83.629), bate así todos los récords desde su creación en 1980.

Tan importante como la cantidad es el «excelente estado sanitario de la uva», según informó ayer el Consejo, que añadido a la falta de precipitaciones durante las semanas de vendimia, «auguran unos vinos de gran calidad».

El 99,07% del total cosechado corresponde a uvas blancas. La más numerosa es la variedad autóctona verdejo, que supone el 86,27% de la producción total, con 112.627.062 kilos acogidos.

«Se trata de una muy buena cosecha para un año en el que afrontamos retos como la nueva imagen y nuevas medidas de seguridad», explicó ayer en respuesta a este periódico el director general de la DO Rueda, Santiago Mora. «Queremos dar relevancia a la marca Rueda, que no es solamente verdejo, y añadir otros valores como el clima, el suelo, y los mil años que lleva presente la vitivinicultura en Rueda, con numerosas familias a lo largo de muchas generaciones».

Rueda consolida así su liderazgo absoluto entre los vinos blancos de calidad de España, donde acapara el 40% del mercado, según el último informe Nielsen. A distancia de las dos denominaciones siguientes, Rioja y Rías Baixas, con alrededor del 10% cada una. Rueda ocupa, además, el tercer lugar cuando se trata de vinos de calidad en general, tras Rioja yRibera del Duero. Un lugar muy importante si se tiene en cuenta que sólo el 27% del vino que se consume en España es blanco.

Variedades

La vendimia comenzó la noche del 31 de agosto con la variedad sauvignon blanc, cuyo ciclo vegetativo es más corto que el resto, informó el Consejo Regulador. Una semana después comenzó la recogida de la verdejo. Una de las características principales de esta vendimia fue la falta de precipitaciones, que facilitó las labores en el campo, y que contribuyó «al excelente estado sanitario con el que la uva ha entrado en bodega». Jesús Díez de Íscar, director técnico de la DO, aseguró que la campaña «se ha desarrollado con total tranquilidad, en condiciones óptimas y con notables diferencias entre las temperaturas diurnas y nocturnas. Se ha ido vendimiando según lo indicaban los índices de madurez de cada parcela, buscando el mejor equilibrio entre el grado y la acidez, lo cual es fundamental para elaborar vinos de gran calidad».

La superficie registrada ha sido de 16.358,11 hectáreas, con un incremento de 1.673,04 respecto al año pasado. De ellas, el 97,22% (15.904,09) corresponden a variedades blancas y de éstas, el 86,7% corresponden a la verdejo. Este año, en la vendimia de la DO se han registrado 1.540 viticultores y 69 bodegas elaboradoras, entre las que se encontraban dos bodegas nuevas: Rodríguez Sanzo, S. L. y J. Fernando Bodegas y Viñedos, S. L.

La añada 2018 llegará en unos meses al mercado, arropada por el cambio de la imagen corporativa en la DO Rueda. «El nuevo logotipo y las renovadas contraetiquetas, reivindican la marca Rueda con una imagen más fresca que busca la conexión con la gente joven, pero manteniendo a los consumidores actuales», aseguró Carmen San Martín, presidenta de la DO.

A lo largo del año, alrededor de 3.000 familias viven de la vitivinicultura en el territorio de la DO Rueda directa o indirectamente. El Consejo Regulador contrató durante la campaña a 62 auxiliares de vendimia, aunque «habrían venido bien algunos más», apuntó Mora.