El Puente pone en marcha un servicio pionero en Valladolid para atender a personas sin hogar con problemas de salud mental

El Puente Salud Mental Valladolid afronta el reto de intervenir con personas sin hogar con problemas de salud mental en su entorno. Hasta el momento, las intervenciones se realizaban en la sede de la entidad y muchas de las personas derivadas de otros recursos como la Red de Personas sin Hogar no llegaban a dar el paso de acudir por lo que no se podía iniciar una intervención con ellos.

Así fue como se vio la necesidad de poner en marcha el Equipo de Detección e Intervención de Calle (EDIC) cuyo objetivo, según explica Elisabeth Juárez, coordinadora del Área de Promoción de la Autonomía e Inclusión Social es “prestar una atención integral a personas sin hogar con problemas de salud mental con la finalidad de garantizar la atención de sus necesidades básicas y promover la inclusión y participación en la vida social y laboral”.

El equipo está formado por una educadora social y trabajadora social que llevan a cabo una intervención centrada en tres fases. Una primera, de contacto y acogida, donde los profesionales contactan con la persona en su propio entorno y valoran el caso en función del perfil, situación, intensidad… En una segunda fase, se lleva a cabo un Plan de Apoyos Integrados y en la tercera, la ejecución y seguimiento de la intervención.

El servicio se puso en marcha hace escasos dos meses y desde entonces ya han contactado con once usuarios, de los dos son mujeres. Datos totales que desde la entidad valoran como “excepcionales, ya que se trata de un colectivo, el de las personas sin hogar, difícil de trabajar por la falta de confianza”. “Lo que hemos conseguido nosotros”, añade, “es llegar hasta ellos, ganarnos su confianza a través de una relación de proximidad”. En su opinión, “esta fase es vital para lograr el desarrollo de las otras dos fases donde se articulan las intervenciones sociales”.