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Carnero liga la estabilidad política con el mantenimiento del empleo en Renault

López anuncia que se entrevistará con los sindicatos y Fernández pide que no se pierda «ni uno»

-J. M. LOSTAU

Publicado por
Santiago G. del Campo
Valladolid

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Representantes de los partidos políticos se posicionaron ayer frente al anunciado cierre del tercer turno de Renault en sus factorías de Palencia y Valladolid, que podría suponer la pérdida de 1.200 puestos de trabajo.

Para el presidente del Partido Popular de Valladolid, Jesús Julio Carnero, se trata de «una pésima noticia para todas y cada una de las familias afectadas», y deseó que «más pronto que tarde» se pueda recobrar «este turno tan beneficioso y que estaba contribuyendo tanto al desarrollo social de todos nosotros como provincia, como al desarrollo económico».

A juicio del responsable del PP, este es un momento «para acordarse de las familias» afectadas. Deseó que pronto «se recupere ese tercer turno», y que «no se contribuya con inestabilidades políticas a que esta situación se perpetúe». Así, aterrizó en la actualidad del día y, haciendo referencia a la moción de censura anunciada por el PSOE, dijo: «Hoy es el día en el que algunos, y por todos ellos el señor Pedro Sánchez, desde su insensatez y desde su inconsciencia, están contribuyendo a que los españoles no sigamos disfrutando la estabilidad política tan necesaria para que tengamos estabilidad económica y social».

Carnero llamó a contribuir «entre todos» para que se den las condiciones necesaria para «recuperar ese tercer turno».

Alcance

Por su parte la secretaria provincial del PSOE, Teresa López, anunció que se entrevistará con responsables sindicales la semana que viene, tras la reunión con la empresa, «cuando se sepa con exactitud el alcance de la supresión de ese turno», explicó en respuesta a este periódico.

«Desde luego, todo lo que suponga la pérdida de puestos de trabajo es malo, y lo vemos con cierta preocupación», aseguró. Mostró asimismo su sorpresa por el anuncio de Renault, ya que «se estaba diciendo hasta ahora que había carga de trabajo suficiente, y por eso la noticia nos ha dejado fríos».

El líder del Podemos en Castilla y León y portavoz de la formación en las Cortes, Pablo Fernández, se pronunció en Palencia sobre el cierre del tercer turno en las factorías de Renault. Exigió a la firma automovilística que no se pierda «ni un solo empleo» y reclamó, además, que tenga en cuenta la precariedad laboral pues «hay temporalidad y mucho personal eventual» en las factorías de Palencia yValladolid.

Pidió también a la Junta, en declaraciones que recogió Ical, que mantenga «la misma preocupación» que demostró con Nissan en Ávila y que exija a Renault el mantenimiento del empleo en Palencia, después de haber dado más de 50 millones de euros a la alianza Nissan-Renault en la factoría abulense.

El alcalde de Palencia, AlfonsoPolanco, manifestó que el cierre del tercer turno se debe al comportamiento de las empresas de automóviles en el mercado, donde se ven sometidas a fuertes altibajos de demanda. Por eso las factorías necesitan cierta flexibilidad.

Según el regidor palentino, ya era conocido que sería imposible mantener un tercer y cuarto turnos, pero confió en que en próximos modelos «se puedan recuperar esos puestos de trabajo», ya que Renault es una de las empresas «mejor preparadas» como «ha demostrado» en sus últimos planes industriales.

Los sindicatos se mostraron cautos y prefirieron esperar a lo que la empresa les comunique en la reunión convocada el próximo martes. Así lo aseguró la responsable de UGT, Laura del Ser. También el secretario general de la sección intercentros de Renault España de CCOO, Rubén González. «Vamos a esperar a ver cómo se desarrolla la primera reunión. Para nosotros es importante mantener el empleo dentro de los parámetros que marcamos en el plan industrial», subrayó.

El responsable de CGT, Unai Hernández, lamentó que, aunque la empresa no les había informado, el cierre del turno era «la crónica de una muerte anunciada», ya que «las empresas proveedoras sabían lo que estaba pasando y nos lo decían». Culpó a la Junta y la Administración central por dar dinero a la empresa pero luego «mirar para otro lado cuando hay contratos en fraude de ley».