Diario de Valladolid

La autovía de la vergüenza

El trazado entre Tordesillas y Salamanca de la autovía europea A-62/E-80, que soporta más de 12.000 vehículos diarios, presenta un lamentable estado y el ministerio se limita a colocar señales de peligro saltan piedras

Aspecto que presenta el firme de la autovía A-62/E-80, a la altura del kilómetro 177, de camino hacia Salamanca. En una foto tomada en la mañana de ayer.-J.M. LOSTAU

Aspecto que presenta el firme de la autovía A-62/E-80, a la altura del kilómetro 177, de camino hacia Salamanca. En una foto tomada en la mañana de ayer.-J.M. LOSTAU

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Felipe Ramos
Valladolid

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Noventa kilómetros separan la localidad vallisoletana de Tordesillas y Salamanca. Un trayecto por una autovía que, por su estado, bien puede ser calificada como la autovía de la vergüenza.

Baches, socavones, un asfalto suelto, desconchado, del que saltan constantemente piedras, además de la deficiente pintura en la mayoría de estos 90 kilómetros entre Tordesillas y la capital salmantina, son el día a día que tienen que padecer los miles de conductores, más de 12.000 según los datos del propio Ministerio de Fomento, que circulan por la A-62/E-80. Una autovía que, conviene reseñar, es de trazado europeo porque supone la salida natural de la meseta haciaPortugal, de ahí que se la conozca como la ruta de los portugueses.

Una realidad que dibuja el lamentable estado que presenta el recorrido, que en su mayoría transita por tierras vallisoletanas, ante la dejadez del Ministerio de Fomento, que dirige Íñigo de la Serna. Departamento que, lejos de tomar cartas en el asunto y plantearse tan siquiera su arreglo, se está limitando –como demuestran la fotos de ayer mismo que acompañan esta información– a colocar señales y paneles informativos de reducción de velocidad, firme en mal estado y peligro, alertando que saltan piedras.

Y no se trata sólo de algún tramo de los 90 kilómetros entre la capital del Tratado y Salamanca. Los parches, las piedras sueltas, los badenes y continuos bacheados comienzan en Tordesillas y no finalizan hasta llegar la capital salmantina.

Obras de mejora y arreglo del firme, ninguna. Los únicos operarios que se ven a lo largo y ancho del recorrido están sólo para colocar las señales de peligro y limitación de velocidad. Esa es la única actividad que se observa y que, parece claro, viene a evidenciar la nula intención del ministerio de Íñigo de la Serna por hacer trabajo alguno para paliar el mal estado de la calzada.

Lo más curioso de todo es que en gran parte del trayecto los operarios de Fomento, además de alertar de la grave situación de deterioro del firme, trabajan en la colocación de la señalización vertical con la que se prohíbe circular a más de 100 kilómetros. Una medida que resulta cuando menos soprendente si tiene en cuenta que de los más de 12.000 vehículos que la transitan a diario, el 30% son camiones. Vehículos pesados que son los que más dañan el asfalto, por razón de su peso, y que ya tienen prohibido el circular a más de 100 kilómetros, con lo que la señal de limitación más bien poco va ayudará a evitar un mayor daño en el ya de por sí maltrecho asfalto de la autovía de camino a Salamanca.

La A-62/E-80 es una de las conexiones más importantes de la Comunidad.Sus más de 12.000 vehículos diarios de media, de los que en torno a 3.200 son extranjeros, sólo son superados por la A-6 y la A-1.Datos que demuestran su relevancia y que hacen que se entienda aún menos la dejadez en su arreglo que demuestra Fomento.

De la Serna visita en Soria el pequeño tramo de la A-11

El ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, visitará hoy las obras de la Autovía del Duero (A-11) en la provincia de Soria, en concreto, las que se ejecutan en el pequeño tramo entre Santiuste y la variante de El Burgo de Osma, a la altura de Valdenarros. La presidenta del PP de Soria, Mar Angulo, significa la importancia de contar con la presencia del ministro y que conozca de primera mano las obras de esta autovía, que ha sido «una demanda de los sorianos y del resto de ciudadanos de Castilla y León durante 30 años», asegura según recoge la agencia Ical.

Angulo recuerda que es el Gobierno del PP quien ha desbloqueado las obras, quien las puso en marcha y quien tomó la decisión de destinar inversión para los seis tramos sorianos. «Actualmente son más de 100 millones de euros los que se han destinado a esta infraestructura, una cifra que demuestra el compromiso del Gobierno con esta provincia», indicó, para recalcar que el PP solo promete aquello que sabe que cumplirá.

ATENCIÓN A LA LUNAS DE LOS VEHÍCULOS, SALTAN PIEDRAS

De camino a Salamanca y de vuelta a la localidad tordesillana, el trayecto de la autovía aparece jalonado de señales, muchas de ellas colocadas en los últimos días, en las que se alerta del peligro que supone la circulación ante el riesgo de que salten piedras. Señalización vertical que se encuentra en los kilómetros 185, 169 y 156. Toda un aviso que parece querer indicar el riesgo evidente de rotura de las lunas de los vehículos y, lo que resulta más importante, de la peligrosidad que supone el circular por una autovía con este asfalto.

FOMENTO MIENTE HASTA EN LAS SEÑALES

Los paneles informativos, en los que se avisa del mal estado de la carretera son también una constante en los 90 kilómetros que separan Tordesillas de Salamanca. Lo peor es que el Ministerio de Fomento miente hasta en los paneles, como el de la foto, cuando alerta de firme irregular entre el kilómetro 157 y el 193, cuando en realidad ese mal estado es constante en todo el recorrido.

OBRAS SÓLO PARA SEÑALES DE FIRME EN MAL ESADO

Operarios sí se ven, pocos, pero ya no están ni para el parcheado de los innumerables baches. Los trabajadores que se pueden encontrar a lo largo del recorrido sólo están para colocar las señales alertando del peligro que supone el circular por la autovía de camino hacia Salamanca. Una demostración más de la nula intención del ministerio de Íñigo de la Serna por hacer algo para poner fin al grave deterioro de una asfalto que empeora por momentos.

CIRCULAR A MÁS DE 100 POR EL FIRME

A menos de 100 por una autovía, donde la limitación en circunstancias normales es de 120 kilómetros por hora. La pésima situación del asfalto hace que la autovía A-62, entre Tordesillas y Salamanca, vea limitada su velocidad en 20 kilómetros menos de lo habitual. Una prohibición que se prevé innecesaria en cuanto a paliar un mayor daño de la carretera, que conecta la meseta con Portugal, porque un 30% de los vehículos que la recorren son pesados y ellos ya tiene prohibido circular a más de 100.

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