El Patio Herreriano de Valladolid inicia un ciclo de cine dedicado a John Cassavetes
Hasta el viernes se proyectarán 'Rostros', 'Noche de estreno' y 'Una mujer bajo la influencia'
El salón de actos del Museo Patio Herreriano de Valladolid inicia hoy, y hasta el próximo viernes, un ciclo de cine dedicado al norteamericano John Cassavetes, considerado como uno de los más grandes maestros del cine internacional. Serán tres de sus grandes obras las que podrán contemplarse en este ciclo, que arranca hoy con la proyección de 'Rostros' (1968), a la que seguirán mañana 'Noche de estreno' (1977) y 'Una mujer bajo la influencia', que el viernes cerrará el ciclo. John Cassavetes fue un director, guionista y actor estadounidense que está considerado como pionero del cine independiente y uno de los máximos representantes del cine independiente norteamericano.
En 1959, el que por entonces era un joven actor de la televisión neoyorquina que se instaló con unos amigos en las aceras de Nueva York y, con una cámara de 16 milómetros, y sin más presupuesto que el que le cabía en el bolsillo, rodó 'Sombras', filme artesanal que trastocó muchas cosas en la poderosa industria del cine estadounidense. Nacieron allí el movimiento del cine independiente neoyorquino y un manifiesto, donde el cineasta profetizó el ocaso de Hollywood, porque ña obra de Cassavetes, que murió en 1989 a los 60 años, es un capitulo esencial del cine moderno.
Confluyeron en la formación de su compleja personalidad artística varias fuentes. Por un lado, el cine 'underground', que en los años 50 animaban los hermanos Jonas y Adolfas Mekas y aglutinaba a cineastas experimentales como Andy Warhol, Keeneth Anger, Shirley Clarke. y otros pioneros del cine de acera neoyorquino. Y, por otro, la edad dorada de la televisión neoyorquina, escuela en la que, a la par que Cassavetes, se formaron en los años 50 y principios de los 60 directores de la talla de Arthur Penn, Robert Mulligan, John Frenkenheimer, Martin Ritt, Sidney Lumet, Sam Peckinpah, Sidney Pollack, George Roy Hill; y actores renovadores de la potencia de Marlon Brando, Paul Newman, James Dean, Ben Gazzara, Seymour Cassel, Gena Rowlands.
La de Cassavetes es una obra pequeña por su necesidad de autoproducción y porque compaginó la dirección con incursiones como actor para afrontar sus proyectos personales, en algunos de las que también actuó con una fuerza y singularidad enormes. La muerte, abatido por una cirrosis, de John Cassavetes dejó convertidos en irreparables vacíos algunos proyectos de gran aliento, de los que habló una vez él mismo poco antes de su final y que, tras ocurrir éste, evocó su viuda, Gena Rowlands.