«Tras la reestructuración, la Concejalía va a tomar las decisiones en política cultural»

La concejala de Cultura y Turismo, Ana Redondo, explicó que la reforma estructural en su departamento servirá para ser «más eficientes y racionales». Para ello, contará con tres elementos fundamentales.

El elemento legislativo será el que tome las decisiones. En este caso, será la Concejalía y los representantes públicos que son los que han sido elegidos por los ciudadanos para ello. Eso sí, en la toma de decisiones va a contar con un Consejo de las Artes y de la Cultura, que estará en contacto con la calle. En ese órgano también estarán los directores de los centros culturales, quienes mantendrán «las marcas de calidad» de la ciudad, como son Seminci, el Patio Herreriano, entre otras.

Otro elemento será el ejecutivo, que será el que lleve a la práctica el presupuesto. El encargado de esta función será la Fundación Municipal de Cultura, en la que estarán integrados todos los trabajadores de las distintas fundaciones. «Toda esa capacidad de ejecutar va a estar mejor orquestada en equipos», precisó.

Por último, estará el órgano de control, un equipo económico, financiero y jurídico que se encargará de revisar todo. En su opinión, es una estructura «más razonable» que «sin más recursos» va a intentar que la Concejalía de Cultura y Turismo funcione mejor.

Sobre el nuevo director del Patio Herreriano, adelantó que ya está presupuestado y que habrá que esperar «seis meses». El siguiente punto será presentar las bases para que sean aprobadas en el próximo Consejo Rector, que se celebrará a principios de febrero.

Redondo también comentó que, entre las ideas que espera poner en práctica, está crear un turismo basado en el aprendizaje del español. Citó el caso de Chester, una ciudad mediana de Inglaterra donde los jóvenes tienen su primera experiencia con el idioma.