El 60% de los comerciantes vallisoletanos están insatisfechos con la campaña de las rebajas de verano
Las ventas alcanzaron unos niveles similares a los de la temporada anterior
Campaña de rebajas de verano en un local comercial.-ICAL
El 60 por ciento de los comerciantes de Valladolid se muestran insatisfechos con los resultados obtenidos tras finalizar la campaña de rebajas de verano, según la Agrupación Vallisoletana de Comercio (Avadeco) ya que, pesar de que las ventas alcanzaron unos niveles similares a los de la temporada anterior, las previsiones eran más optimistas. Los comerciantes atribuyen este estancamiento a la pérdida de sentido al confundir promoción y rebajas, y al permitir el inicio escalonado sin fecha fija.
A pesar de los resultados decepcionantes, un 75 por ciento de los vallisoletanos participaron en la campaña de rebajas, un dato que tiende a mantenerse. Los sectores más demandados por los ciudadanos siguen siendo la ropa y el calzado.
Asimismo, Avadeco considera que estos resultados pueden estar también condicionados por las promociones del mes de junio, además del adelanto de la fecha de inicio por parte de muchos establecimientos. A pesar de esto, las ventas del mes de agosto permitieron una ligera recuperación.
El 90 por ciento de los comerciantes revindican la necesidad de un cambio en el control de las rebajas y promociones y añaden que las aperturas dominicales suponen una gran ventaja para las grandes superficies y centros comerciales. Además, el 70 por ciento de los comerciantes apuntan que las temporadas de rebajas son demasiado largas.
Desde la agrupación de comerciantes se apunta que la situación de las ventas ya no tiene relación con la crisis, sino con el cambio de los hábitos de consumo. Por una parte se encuentra el choque de prioridades entre el comercio y otras actividades como los viajes o las nuevas tecnologías, y por otra el cambio en los formatos de venta, como la venta online.
Por ello, los empresarios se han visto obligados a aumentar los descuentos medios aplicados, y señalan que se encuentran al límite por los ajustados márgenes comerciales en los que se mueven. A pesar de todo, reiteran que las rebajas no pueden desaparecer, porque suponen un flujo de atracción de clientes fundamental.
De cara a la campaña de otoño invierno mejoran las previsiones de los comerciantes, el 65 por ciento de ellos confían en vender más que el anterior, debido a la recuperación de la confianza del consumidor y la mejora de los datos de empleo.