Arroyo se une a la EDAR y sólo Simancas y La Cistérniga siguen sin engancharse
Fomento invierte 4,6 millones de euros para que el alfoz solucione sus problemas de vertido
El consejero de Fomento y Medio Ambiente visita el colector de aguas residuales de Arroyo de la Encomienda.-ICAL
La depuración de aguas residuales ya no es la asignatura pendiente de los pueblos del alfoz de Valladolid. Arroyo de la Encomienda y Zaratán dijeron adiós ayer de forma oficial a sus problemas de vertido de aguas residuales tras una inversión de 5,4 millones de euros, de los que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente aportó 4,6 millones y los respectivos ayuntamientos el resto.
Ambas localidades llevan sus aguas residuales a la estación depuradora de Valladolid, en funcionamiento desde 1999, al igual que lo hace Laguna de Duero y próximamente Simancas. Entonces, sólo quedaría La Cistérniga para cerrar el círculo del agua en los municipios situados en el cinturón de la capital, si bien la obra de esta localidad vallisoletana depende de la Administración General del Estado.
Arroyo de la Encomienda contaba con una depuradora obsoleta, incapaz de tratar el vertido procedente de sus más de 19.000 vecinos, lo que generaba malos olores y vertidos deficientes. Para solucionar este problema, explicó el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, se han construido unas conducciones que llegan a la EDAR de Valladolid y una planta de bombeo, con tres colectores de 300, 800 y 1.500 milímetros que recogen todos los vertidos de los diferentes barrios de Arroyo para ser bombeados hasta la depuradora de Valladolid para su tratamiento. Para ello, fue necesario realizar tres perforaciones de 350 milímetros cada una, bajo el río Pisuerga, y colocar tres bombas de 50 kilovatios. Además se instaló un tanque de tormentas para almacenar los primeros 675 metros cúbicos de cada tormenta para posteriormente enviarlos a la estación depuradora.
El presupuesto total de la obra fue de 2,5 millones de euros, de los que el Ayuntamiento arroyano ha aportado 375.000 euros y dará servicio a casi 55.000 habitantes frente a los 12.000 actuales. Su regidor, José Manuel Barrio, se mostró satisfecho ya que esta «gran obra» ha eliminado olores y molestias «sin provocar ningún problema».
Zaratán, por su parte, vertía sus aguas sin depurar al Arroyo Madre. Para solucionar esta cuestión se ha creado una red de cuatro kilómetros y medio de conducciones para llevar los residuos a la EDAR de Valladolid. El municipio ya lo hace desde principios del año pasado y sus aguas llegan limpias al Pisuerga.
El presupuesto de este proyecto es de tres millones de euros, con una aportación municipal de 450.000 euros. La población beneficiada será de 17.000 habitantes. La alcaldesa de Zaratán, Susana Suárez, comentó que la obra ha supuesto una «gran mejora» para los ciudadanos que, además, ha permitido la creación de un sendero bici por encima del Arroyo Madre.
Suárez-Quiñones aseguró que las obras de mejora son fruto de una actuación «muy responsable» que se enmarca dentro de la depuración de aguas residuales de la Junta, que en esta legislatura cuenta con 75 millones de euros en 40 actuaciones, 11 de ellas en Valladolid, por un importe de 26 millones.
De esta forma, añadió, se complementará «el 97% de la depuración de aguas residuales», lo que corresponde a 198 núcleos de población. Además, concretó que durante este año se van a invertir 11 millones de euros, de los que 4,3 son para la provincia vallisoletana. «Damos cumplimento estricto a la normativa y es un símbolo de modernidad», apostilló.
No obstante, el consejero de Fomento y Medio Ambiente aclaró que con este paso la depuración de Castilla y León no estaría terminada, ya que habría que actuar también en los municipios de menos de 2.000 habitantes y en los espacios naturales. Por ello, manifestó que están en contacto con las nueve diputaciones y en «un plazo razonable» se llegará a la depuración integral.
La Junta «cumple» con la normativa sobre calidad del aire
El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, aseguró ayer que la Junta «cumple» con la normativa tanto nacional como europea sobre calidad del aire.
En este sentido, señaló que su departamento cuenta con una red de estaciones de medición con unos resultados que se publicitan «de forma inmediata» y siempre que algún tipo de contaminante supera las cifras estimadas, se avisa a la población y se toman las medidas adecuadas.
A pesar de las peticiones del Ayuntamiento de Valladolid y Ecologistas en Acción para que el Ejecutivo autonómico elabore un Plan de Calidad del Aire, consideró que están haciendo lo correcto al participar en la elaboración de una norma de este tipo pero de aplicación nacional.
Y es que, según expuso el titular de Fomento y Medio Ambiente, los problemas que tiene Castilla y León son «muy pequeños» y «particulares», por lo que, a su juicio, no procede elaborar un plan de ozono para la Comunidad e insistió en que las actuaciones de la Junta se han ajustado a la legalidad vigente.