El CES alerta del riesgo de que se «cronifiquen» los desequilibrios

La economía en España vuelve a valores anteriores a la crisis –más en Castilla y León, que crece una décima por encima de la media nacional–, pero hay que establecer medidas urgentes para que ese crecimiento no se traduzca en más desigualdades. Ésas son, a grandes rasgos, las dos principales conclusiones del último informe anual del Consejo Económico y Social (CES) presentado ayer en Valladolid.

«Es un momento de reajuste global, en el que tenemos que ser proactivos desde todas las instituciones y desde el Gobierno regional para evitar desequilibrios territoriales y desigualdades sociales». Con estas palabras el presidente del CES, Germán Barrios, inició una exposición pormenorizada de las principales conclusiones del estudio, que establece las principales recomendaciones del CES al Gobierno de la Comunidad autónoma.

Se trata de un diagnóstico compartido por los agentes económicos y sociales, pues ha sido aprobado por unanimidad. El informe anual es el documento más relevante del CES, principal órgano consultivo del Gobierno regional en materia económica, laboral y social.

«Si seguimos el crecimiento al mismo nivel que el primer semestre, acabaremos 2017 en crecimientos económicos y actividad económica anterior a la crisis», explicó. «Por eso se necesita un punto de inflexión en el que se tienen que lograr tres objetivos: mejorar nuestro tejido empresarial, mejorar la estabilidad y calidad de nuestro empleo y mejorar el poder adquisitivo de nuestras familias y de nuestros trabajadores», afirmó.

Así, según el principal estudio del CES, la economía de Castilla y León creció a un ritmo del 3,3%, una décima más que el conjunto de España. Sin embargo, ese dinamismo económico no se trasladó en la misma medida en el empleo, que sí subió, pero sólo un 2,8%.

Por otra parte, los costes salariales y laborales mantienen un nivel inferior a la media nacional, si bien en parte se explican por un menor rendimiento. Por ello «es imprescindible conseguir un incremento de la productividad», por lo que el CES recomienda «poner el foco de atención en el modelo de tejido empresarial, más orientado hacia una producción industrial y de servicios de mayor valor añadido».

También señala la necesidad de incrementar el tamaño de las empresas e impulsar las nuevas tecnologías. En definitiva, el órgano consultivo cree que Castilla y León necesita una reconducción de su modelo productivo.

Pero las medidas para el incremento de la productividad no son suficientes por sí solas. Para que «no se cronifiquen» las desigualdades mencionadas al principio son necesarios «más derechos sociales, políticas públicas que garanticen la equidad, empleo de calidad, más poder adquisitivo de los salarios y servicios públicos de calidad».

Por su parte el presidente de Cecale, Santiago Aparicio, consideró necesaria una mayor apuesta por la I+D+i, el fomento de los clúster y la innovación. También vio esencial «que se mejore el acceso a la financiación», punto en el que pueden tener un papel determinante «la Lanzadera e Iberaval».

La mejora de la conexión digital y la consecución de algunas infraestructuras, principalmente la A-11, «eje clave del eje este-oeste», fueron otros de los puntos prioritarios señalados por Aparicio.

OTROS CONSEJOS DEL CES A LA JUNTA

Agricultura. Desarrollo normativo de la ley agraria y reconocimiento de las OPAS como entidades colaboradoras para la elaboración de la norma. Apertura al exterior del sector primario. Apuesta por las marcas de calidad. Mejora de la formación. Plan de rescate contra los efectos de la sequía.

Industria. Pacto de estado por la industria, crecimiento en tamaño del tejido y de las industrias. Alcanzar el 20% del PIB de acuerdo con los objetivos 2020. Medidas para evitar la deslocalización de empresas, como reclamar ayudas dadas a las que se deslocalicen.

Energía. Proyectos de interconexión junto a otras administraciones. Pacto de mayor alcance para la dinamización económica de los municipios mineros. Duplicar la contribución del carbón autóctono.

Construcción. Impulso a la obra pública, a la rehabilitación y a la regeneración urbana. Reactivar la construcción por su capacidad de empuje sobre la economía.

Servicios. Control más exhaustivo de las empresas multiservicios nacidas ‘al amparo’ de la crisis. Servicios financieros que apoyen a los proyectos locales y a la Lanzadera Financiera. Apoyo a la economía del conocimiento.

Sector público . Estructura fiscal adecuada y suficiente. Impulso al control del gasto improductivo. Mejora del modelo de financiación autonómica. Equidad y progresividad.