La alcaldesa de Zaratán lleva a juicio al Consistorio por su sueldo
Interpone un recurso contra el acuerdo de Pleno que le rebajó el salario a 12.000€ anuales
La alcaldesa de Zaratán, la ‘popular’ Susana Suárez.-SANTIAGO G. DEL CAMPO
La alcaldesa de Zaratán, Susana Suárez (PP), pleitea en los tribunales contra su propio Ayuntamiento para recuperar el sueldo que le rebajó la oposición, en mayoría, hace cuatro meses. Ha interpuesto un recurso contencioso administrativo contra el acuerdo de Pleno del pasado 8 de noviembre por el que su salario, de 32.000 euros brutos anuales por una dedicación completa (unos 1.800 netos al mes), se vio recortado hasta los 12.000 por media jornada (alrededor de 800 mensuales netos).
Suárez –que ya anunció su intención de recurrir a los pocos días de celebrado el Pleno, como avanzó este periódico–, considera que es necesario resolver “esta situación ridícula”, dijo, por la que pasó a ser la trabajadora municipal peor pagada del Ayuntamiento, con una remuneración inferior al funcionario de más baja categoría laboral.
En opinión de la regidora, con esa medida impuesta por la oposición está sufriendo una situación injusta: «Se me está impidiendo tener un trabajo, porque la Alcaldía requiere toda la jornada, y también se me niega un salario digno», aseguró.
Muy distinta es la opinión de los portavoces de la oposición, que esta semana se mostraron sorprendidos al ver el anuncio del pleito en el tablón de anuncios de la Casa Consistorial. “Es la primera alcaldesa que denuncia a su propio Ayuntamiento para conseguir en tribunales lo que no ha podido conseguir en el Pleno”, declaró a este periódico la portavoz del Grupo socialista, Alejandra Fernández. “No se lo ha pedido a su Grupo porque sabe que le van a decir que no”, añadió.
En la misma línea se manifestó el portavoz de IU–Toma la Palabra, Miguel Torres: “La alcaldesa no ha aceptado el principio democrático elemental de que lo que el Pleno da, el Pleno lo quita”, afirmó. “Las resoluciones del Pleno sólo le gustan cuando le son favorables. Lo que intenta llevando el asunto al Contencioso –y que pretende que le paguemos todos–, es ver si suena la flauta, porque el dinero es el dinero”.
El Ayuntamiento, en respuesta al oficio remitido por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 4 de Valladolid, que instruye el expediente, también ha publicitado el anuncio a través de la página web municipal, y lo ha notificado a los concejales. Se publicará en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), para cumplir con el artículo 49 de la Ley Reguladora de la Jurisdicción Contencioso Administrativa (LRJCA), que obliga a emplazar a los que aparecen como interesados en el expediente “a fin de que, si les conviene, se personen en el procedimiento en el plazo de nueve días contados desde el siguiente a la publicación del anuncio”. La fecha de salida del Registro municipal es de 6 de marzo.
Los tres grupos de la oposición junto al edil no adscrito, que sumaban mayoría, bajaron el sueldo a la alcaldesa un 65%, en el mencionado Pleno del 8 de noviembre. Ahora la situación en la Corporación de Zaratán ha cambiado ya que este último edil, Rainerio Braña, se asoció en pasado 14 de febrero como concejal de Urbanismo al equipo de Gobierno, dando al traste con una moción de censura en la que había participado. Pero no parece estar de acuerdo Braña con la restitución de los antiguos salarios, ya que él mismo ha renunciado a cobrarlo por su área, según explicó. Así, la vía política para la restitución no sería viable.
Susana Suárez no fue la única edil del equipo de Gobierno en ver drásticamente recortado su salario aquel 8 de noviembre. Junto a ella, la oposición bajó el sueldo a la mitad a dos concejales con dedicación parcial, que también recuperarían sus antiguas retribuciones si el contencioso prospera.
La concejala de Hacienda, Desarrollo Económico, Patrimonio y Servicios, Esther Peláez, vio reducida su remuneración, por una dedicación del 50%, de los 12.000 euros anuales a 6.000. Por otra parte el entonces concejal de Festejos, Cultura y Juventud, Roberto Migallón (hoy sólo titular de las últimas dos áreas al renunciar a la primera el pasado martes), sufrió un recorte en su paga, por una jornada del 25%, de los 6.000 euros iniciales a sólo 3.000. «Los concejales de la oposición cobran más que eso sólo por la asistencia a plenos y comisiones», se quejó la regidora.