Un empleado de Viva cobra hace 16 años otro sueldo del Herreriano de Valladolid

Diciséis años. Eso es lo que lleva un empleado público de la Sociedad de Vivienda (Viva) del Ayuntamiento de Valladolid percibiendo otro sueldo de la Fundación del Patio Herreriano.

Juan José Alonso Arconada es técnico contable, contratado con carácter laboral y puesto de trabajo fijo de Viva, desde el 10 de septiembre de 1996, según informan desde el propio Ayuntamiento. Una categoría profesional por la que está adscrito al grupo 2 nivel 1 del Consistorio vallisoletano y por la que percibe un salario de 55.000 euros brutos al año en catorce pagas y dos gratificaciones anuales de 600 euros cada una.

El 4 de julio de 2001, Alonso Arconada solicitó al Ayuntamiento que le fuera «concedida la compatibilidad para trabajar con carácter privado, como diplomado en Empresariales», según consta en la documentación a la que ha tenido acceso EL MUNDO DE VALLADOLID. Compatibilidad que, finalmente, se le concedió con 25 votos a favor y dos abstenciones. Eso sí, en su petición nunca se indicó que esa actividad profesional de «carácter privado» fuera a ser en la Fundación del Patio Herreriano, adscrita a laConcejalía de Cultura que hoy preside Ana Redondo.

Dos días después de la sesión plenaria, el 6 de julio este empleado público de Viva, sociedad dependiente de la Concejalía de Urbanismo que dirige en este mandato Manuel Saravia, firmó un contrato mercantil con el Patio Herreriano para desempeñar las funciones de «asesoramiento contable, fiscal y laboral de la Fundación del Patio Herreriano». Tarea que sigue realizando en la actualidad, como se demuestra en los últimos presupuestos, que se encuentran colgados en la página web de la Fundación y que Juan José Alonso Arconada firma como «asesor económico».

Un trabajo que le reporta unos ingresos de casi 25.000 euros al año incluido el IVA. De esta manera este empleado público se embolsa la nada despreciable cifra de 80.000 euros por los dos trabajos que desempeña, el de Viva como empleado laboral con contrato fijo, y el de Herreriano, gracias a un contrato mercantil que rubricó en julio de 2001 con la que entonces directora del Museo, María Jesús Abad, y que posteriormente asumió su sucesora en el cargo, Cristina Fontaneda. Desde ese tiempo y hasta hoy nada se ha hecho desde el Consistorio para corregir esta situación. Ni nadie desde la oposición, que hasta no hace tanto ejercían el PSOE e Izquierda Unida que hoy gobiernan, lo denunció en todos estos años.

Ahora, dieciséis años después, Ana Redondo, como vicepresidenta del Patronato de la Fundación del Patio Herreriano informa a Juan José Alonso Arconada a través de una circular que «la Fundación tiene previsto, según corresponda, proveer la atención de las funciones de asesoramiento en materia contable, fiscal y laboral o licitar, en su caso, en el ejercicio 2016-2017 el servicio de asesoramiento que hasta la fecha viene desempeñando». Misiva que le fue remitida al técnico contable de Viva con fecha de 30 de noviembre del año pasado.

Redondo asegura, en declaraciones a este periódico que lo que se va a hacer es «sacar a concurso esa plaza y la de todos los servicios que ahora tiene externalizados el Herreriano, entre ellos el puesto de directora, que sigue vacante desde la salida de Cristina Fontaneda».

La concejala de Cultura puntualiza que esta es una situación que «este equipo de gobierno ha heredado y que ahora estamos en proceso de solventar y de corregir», aclara la vicepresidenta de la Fundación del Herreriano.

Contrato mercantil prorrogable cada 6 meses

Dos días después de la compatibilidad. Primero fue la compatibilidad que le concedió el Pleno del Ayuntamiento de Valladolid para poder ejercer otra actividad de «carácter privado» y, dos días de después, la firma del contrato mercantil entre el Patio Herreriano y el técnico contable de Viva, Juan José Alonso Arconada. Un contrato que, según se recoge en el mismo, era por seis meses y se iría prorrogando cada seis meses por las partes «de mutuo acuerdo».