El paro registra la mayor caída en 20 años aunque se ralentiza la creación de empleo

Más de 5.000 personas abandonaron las listas del paro en Valladolid en 2016, el descenso más pronunciado de las últimas dos décadas en la provincia, que apuntala la tendencia a la baja iniciada tras los años más cruentos de la crisis económica. Esta caída del desempleo (del 11,8%) es, además, superior a la registrada en Castilla y León (del 11,66%) y en el conjunto del país (del 9,54%), que también se anotaron descensos históricos el año pasado con 23.500 demandantes menos en la Comunidad y 391.000 en España.

Esas variaciones interanuales sustentan la lectura más optimista de los datos presentados ayer por el Ministerio de Empleo. El balance resulta menos brillante si observamos las afiliaciones a la Seguridad Social, que crecieron en la Comunidad mucho menos que en España (un 1,84%, frente al 3,12% de media nacional). De hecho, Castilla y León registra uno de los crecimientos más tibios del país en la comparativa interanual, sólo por delante de Asturias y Extremadura. En términos absolutos, el año pasado se crearon 15.967 empleos en Castilla y León.

Por encima de la media autonómica pero por debajo del aumento nacional se queda Valladolid, con un 1,96% más en el último año. Por tercer año consecutivo, el mercado laboral vallisoletano fue capaz de crear empleo, aunque esta vez el ritmo se ralentiza respecto a los dos ejercicios precedentes, cuandolas afiliaciones habían aumentado un 2,63% en 2014 y un 2,72% en 2015. En términos absolutos, hemos pasado de crear más de 5.000 puestos de trabajo al año a alumbrar sólo 3.957 en los últimos doce meses.

En cuanto al comportamiento de diciembre, la estadística revela que la campaña navideña no regaló buenas noticias a la Comunidad. El paro bajó respecto a noviembre, es cierto, pero porcentualmente sólo lo hizo un 1,32%, frente al 2,29% de caída estatal. Y las afiliaciones a la Seguridad Social disminuyeron, un 0,27%, en contraste con el aumento en España, del 0,39%. En términos absolutos, de poco sirve celebrar que 2.378 personas dejaron las listas del desempleo en diciembre si se destruyeron prácticamente el mismo número de puestos de trabajo (2.375 afiliaciones menos durante el último mes del año).

En 2016, todos los sectores redujeron sus respectivas colas de parados en Castilla y León. La mitad de las personas que abandonaron las oficinas del Ecyl lo hicieron gracias a un puesto en el sector servicios, el más empleador, que concentra seis de cada diez demandantes. En concreto, registró 12.537 parados menos que un año antes (y también en diciembre, tuvo un buen comportamiento, al permitir un descenso intermensual en la Comunidad, amortiguando el aumento de desempleados que arrojaron el resto de sectores).

Porcentualmente, la construcción, con un 20,4% menos, se anotó el descenso más acusado el año pasado, con 4.579 parados menos. Le sigue el colectivo de parados ‘sin empleo anterior’, que merma un 14,6%, ya que más de 3.000 personas encontraron su primer puesto de trabajo el año pasado.

El número de parados en agricultura también disminuyó, un 12,53%, con 1.735 parados menos. Y la industria se anotó la caída más modesta, del 8,66%, que permitió reducir el registro en 1.649 demandantes.

Atendiendo al género de los desempleados en Castilla y León, el 55% son mujeres y éstas siguen padeciendo una peor recuperación:el paro bajó un 10,09% entre las desempleadas en 2016 y un 13,4% entre los desempleados.

En cuanto a los jóvenes, otro colectivo afectado por las escasas oportunidades de empleabilidad, hoy hay casi 3.500 demandantes menos en la Comunidad, al disminuir un 18,27%.

La contratación registrada tampoco es para tirar cohetes, en buena medida por el lastre que suponen las cifras del mes de diciembre. El impulso de la campaña navideña no se dejó notar y durante el último mes del año se firmaron 64.022 contratos en la Comunidad, 8.231 menos que en noviembre (un 11,39% menos). En comparación con el año anterior, el balance sí resulta positivo aunque el aumento del 4,43% es dos puntos inferior al alcanzado en la media española. Y, de nuevo, tampoco se puede presumir de la estabilidad del empleo generado: de los 2.718 contratos más de diciembre, sólo 559 eran indefinidos. A lo largo de los doce meses de 2016 se firmaron 886.842 contratos, de los cuales el 92% eran eventuales con fecha de caducidad.

Junto al paro registrado, el Ministerio de Empleo hizo públicos ayer los últimos datos de prestaciones, relativos al mes de noviembre. Y estos revelan otra cara amarga del desempleo:hay 101.059 parados que ya no cobran ninguna ayuda pública en Castilla yLeón. Eso supone el 56% de los inscritos (en España son el 48%). De los demandantes del Ecyl con derecho a recibir una prestación, la mayoría (35.255) cobran el subsidio o una contributiva (35.037). Otros 8.680 ingresan la renta activa de inserción y los 533 restantes, la ayuda por activación del empleo.  

Segovia, la provincia española con mayor descenso del desempleo

Por provincias, Segovia se anotó el mayor descenso del paro el año pasado, no sólo en la Comunidad sino de todo el país. Con un 15,68% menos, las oficinas del paro segovianas ‘despidieron’ a 1.615 demandantes en el último ejercicio, hasta quedarse con 8.685 inscritos al cierre de diciembre.

Las nueve provincias de Castilla y León registraron caídas interanuales del paro. Tras Segovia, los descensos más pronunciados se registraron en Soria (-13,73% y 731 desempleados menos), en Burgos (-13,51% y 3.610 menos) y Zamora (-13,13% y 2.180). Mientras, en Ávila el dato cayó un 12,79%, con 2.032 inscritos menos en las oficinas del Ecyl; en Valladolid, con el mencionado 11,8%;en Salamanca, un 10,6% (-3.274);en Palencia, un 9,7% (-1.233) y en León un 9,37% (-3.815).

En la comparativa intermensual, el paro aumentó en Palencia en relación al mes de noviembre, donde creció un 0,17% con 20 parados más. Por el contrario, la cola de demandantes disminuyó en las otras ocho provincias de la Comunidad. En Ávila bajó un 2,34% con 332 parados menos;en Burgos, el decenso fue del 1,45% (-340); en León, del 1,69% (-635); en Salamanca el número de desempleados cayó un 2,12% (-597); en Segovia, un 0,71% (-62); en Soria, un 2,01% menos (-62); en Valladolid, un 0,72% menos (-274) y en Zamora, un 0,44% menos (-64).

En cuanto a las afiliaciones, las nueve provincias crecieron. Por encima de la media autonómica lo hicieron todas excepto Ávila, Zamora y León. Segovia volvió a despuntar, con un 2,57% más, seguida de Burgos, con un 2,37%. En relación a noviembre, todas las provincias destruyeron empleo salvo Valladolid (496 afiliaciones más) y Ávila (21 más).

Líderes en sangría de autónomos

Castilla y León fue en 2016, por segundo año consecutivo, la Comunidad que más autónomos perdió en España, al experimentar un descenso del 0,9%, que se tradujo en 1.840 trabajadores por cuenta propia menos, al pasar de 201.793 en diciembre de 2015 a 199.953 al cierre de 2016. Por el contrario, en el conjunto de España el número de autónomos se elevó en 26.211 personas (0,8%más), hasta alcanzar los 3.194.210 afiliados al RETA.

Todas las provincias de Castilla y León sufrieron la caída de autónomos, si bien fueron León (-511 autónomos) y Burgos (-394) las que acusaron un mayor descenso frente a Ávila (-5) y Segovia (-11). León es la tercera provincia de España que más autónomos pierde por detrás de A Coruña (-769) y Lugo (-540), informa Ical.