Connectis ‘pilota’ aeropuertos desde Boecillo

La empresa Connectis ‘pilota’ varios aeropuertos desde Valladolid. Las soluciones TIC de esta compañía están en marcha ya en varios aeródromos nacionales e internacionales.

Su sede central en Castilla y León se encuentra en el Parque Tecnológico de Boecillo y es su ‘estrella’ en movilidad a nivel nacional. Desde allí desarrolla varias aplicaciones móviles o sistemas que ya utilizan bases aéreas españolas y latinoamericanas. También diseña el sistema de comunicación interna de una compañía aérea que efectúa vuelos internacionales.

Connectis, asentada en Valladolid hace 18 años y desde hace dos complementada con los centros abulense y leonés, cuenta con 2.000 empleados en España. De ellos, 120 forman la plantilla de laComunidad.

Dedicada a varias líneas de las tecnologías de la información y comunicación, especialmente al área de movilidad, sector sociosanitario y presencia on line, su facturación en el último ejercicio ascendió a 130 millones de euros. Unos datos que esta semana presentó en Madrid su consejero delegado, Graham Johnson.

La aplicación móvil para Aena conecta a los usuarios con cualquiera de los aeródromos de su red de aeropuertos y les permite consultar la información en tiempo real. La información relativa a su vuelo, cualquier cambio que pueda producirse, se les notifica mediante un mensaje.

El sistema se completa con fórmulas para acceder a otros servicios del aeropuerto, como buscar un determinado restaurante o tienda e, incluso, poder efectuar una reserva de aparcamiento.

Por otro lado, su proyecto realizado para una compañía aérea consiste en dotar a los pilotos y al resto de tripulantes de cabina de una solución de distribución electrónica de documentación a través de sus dispositivos móviles, donde la información urgente aparece destacada. Lo manejan 3.000 miembros de la tripulación y en un año se han descargado un millón de documentos.

El tercer gran proyecto relacionado con el sector es el de los aeropuertos del Pacífico, con sede en Guadalajara (México). En esta red de doce bases del país azteca la empresa implantó un sistema de gestión aeroportuaria. A finales de 2015, Connectis lo completó con un sistema digital de asignación de medios. Éste sirve para «optimizar» los recursos, como «cintas de equipajes, limpieza de aviones, terminales asignados o autobuses de pasajeros».

Graham Johnson destacó el potencial de Valladolid en el desarrollo de soluciones de movilidad, la «buena formación de sus profesionales y su proximidad a Madrid».

En los 18 años en los que la compañía lleva en suelo castellano y leonés ha desarrollado más de dos centenares de proyectos para más de una treintena de clientes.

El crecimiento en Castilla y León de Connectis, que pertenece al grupo Aurelius, se aprecia en su plantilla. En 2012 contaba con 50 personas y en la actualidad se han multiplicado por algo más del doble.

Aunque la dependencia del sector público antes de que irrumpiera la crisis era casi absoluta, ahora la proporción entre clientes de la empresa privada y la administración se va equilibrando ligeramente, aunque los principales demandantes de sus productos siguen siendo instituciones de titularidad pública (el 65%) y en menor medida la parte privada en la que figuran Grupo Norte, Renault, Enusa, Zarzuela y Air Europa, entre otros.

En su cartera institucional aparecen casi todos los ministerios, el Ayuntamiento de Valladolid y la Junta.

De hecho, aesta compañía corresponde el sistema informático de acceso a los servicios sociales de la Gerencia regional y del Consistorio vallisoletano.

Graham subrayó que «el conocimiento adquirido en materia de servicios sociales ha colocado a la delegación de Castilla y León como un referente dentro de Connectis en el sector sociosanitario» y explicó que esto «ha permitido que desde Boecillo se esté participando en la actualidad en la primera plataforma de gestión única de la información sanitaria y social del país». Se trata del desarrollo del espacio sociosanitario de Extremadura.

El consejero delegado de la compañía, con presencia en Latinoamérica, destacó la importancia de combinar proyectos locales con otros de mayor entidad. «Si no, es difícil tener calidad y crecer», indicó.

Las oficinas de la Comunidad realizan proyectos para ocho países, entre los que además se encuentran Alemania y Bélgica, y diversifica en varios sectores, como la banca electrónica o el automóvil.

El equipo vallisoletano desarrolló una aplicación móvil para una entidad bancaria árabe que ya cuenta con más de un millón de descargas y, además, diseñó una web móvil para la compra de productos de cobertura en caso de avería o accidente para RAC, el club del automóvil en Birmingham, en el Reino Unido.

Los centros de León y Ávila trabajan en modo factoría, con menos innovación, pero desarrollando procesos de software a medida.