Diario de Valladolid

Tragsa ‘salva’ del ERE a 111 trabajadores pero siguen las movilizaciones

Despide en la Comunidad a 70 de los 181 iniciales, 555 de 1.339 en España Los sindicatos denuncian que convoca ya plazas para los mismos puestos

Trabajadores encerrados en la sede de Tragsa en Valladolid se concentran a las puertas de la entidad.-El Mundo

Trabajadores encerrados en la sede de Tragsa en Valladolid se concentran a las puertas de la entidad.-El Mundo

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Santiago G. del Campo
Valladolid

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La empresa pública Tragsa y su filial Tragsatec anunciaron ayer el cese de la aplicación del ERE extintivo que habían comenzado a ejecutar el pasado mes de diciembre. Ambas entidades explicaron que el expediente ha afectado a 555 personas en toda España, el 5% de la plantilla total, integrada por 10.800 trabajadores. Significa una reducción del 58% sobre los 1.336 despidos autorizados por sentencia del Tribunal Supremo.

De esos despidos, 181 correspondían a Castilla yLeón, donde finalmente se han ejecutado 70, el 61% menos. Ese total se divide entre las dos empresas: Tragsa dio de baja a 59 trabajadores en la Comunidad, y Tragsatec a los once restantes.

El Expediente de Regulación de Empleo en la empresa pública fue rechazado por los sindicatos y los partidos políticos, cuyos representantes han acudido a visitar a los trabajadores encerrados en la sede de la empresa en Valladolid desde el pasado 31 de diciembre, para expresar su respaldo y pedir la supresión del mismo.

La empresa esgrime una drástica caída de producción e ingresos del Grupo Tragsa en más de un 60% a partir de 2009, lo que motivó un saldo de explotación negativo acumulado de más de 70 millones de euros en los ejercicios 2013 y 2014. Eso empujó a la aplicación, en febrero 2013, de un ‘Plan de Transformación Global’ que permitiese superar la difícil situación económica y «garantizar la sostenibilidad y el futuro del Grupo».

Lejos de complacer a la plantilla la finalización del ERE, los sindicatos anunciaron ayer que continuarán las movilizaciones, especialmente el encierro de los trabajadores en la sede vallisoletana y la huelga convocada para día 26 de enero, con una concentración en la calle Génova. «Vamos a seguir porque hay que revertir esos despidos e iniciar una negociación. Esto es una atrocidad», explicaron ayer a este periódico fuentes de Comisiones Obreras (CCOO).

Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), destacó que el grueso de los despidos ha afectado fundamentalmente a trabajadores de entre 40 y 50 años, con una media de 20 años de servicio en la empresa, y añadió que los despedidos «se enteraron de que estaban fuera de la empresa por los ingresos del finiquito recibido en el banco, sin que se les haya notificado nada de manera escrita o verbal, lo que refleja la falta de consideración en las formas», aseguraron en declaraciones que recogió Ical.

CCOO, por medio de sus secciones sindicales, reiteró ayer su «indignación por el proceder de los dirigentes del Grupo». A las pocas horas de hacer público el freno de los despidos, «ha publicitado en Infojobs dos convocatorias para cubrir plazas vacantes de perfiles relacionados con veterinarios para Badajoz (9) y el Principado de Asturias (25)», aseguró el sindicato.

Los distintos grupos políticos en las Cortes de Castilla y León elaboraron una declaración institucional de apoyo a los trabajadores, firmada por los portavoces de PP, PSOE, Podemos, Ciudadanos e IU, informó Europa Press. Reclaman a la empresa un «ejemplo de transparencia» y apuestan por la negociación. Asimismo, instan al Gobierno de España a implicarse en la búsqueda de una solución y revertir en lo posible el conflicto.

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