Consejo de Gobierno
El Ayuntamiento espera el permiso de Sanidad para abrir los comedores
De Santiago-Juárez defiende el modelo de la Junta y dice que Puente «puede hacer lo que crea más oportuno»
El consejero de la Presidencia en funciones y portavoz de la Junta, José Antonio de Santiago Juárez, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de Castilla y León-ICAL
La primera decisión del nuevo equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Valladolid, la apertura de dos comedores escolares en la ciudad para atender a los niños de familias con escasos recursos, apunta a polémica con la Junta de Castilla y León. El alcalde, Óscar Puente, dijo ayer que espera que el Ejecutivo regional conceda los dos permisos que se requieren, el de Sanidad y el del uso del espacio, para abrir los dos comedores previstos en los colegios Alonso Berruguete y Pablo Picasso. «No veo ninguna razón para que la Junta no dé los permisos cuando las empresas que afrontan este primer programa son las mismas que están dando el servicio de comedor y no contemplo esa posibilidad», dijo Puente.
El regidor añadió que no es «un capricho», sino una petición «desde muchos sectores» y advirtió de que lo más probable es que no haya plazas «para atender toda la demanda».
Lo cierto es que, tal y como confirmó la concejala de Educación, Victoria Soto, todavía no hay datos de cuántos pueden ser los beneficiarios y se mostró confiada en avanzar tras el encuentro que mantendrá hoy con el director provincial de Educación y se mostró confiada también en que «la Junta no ponga problemas». Hasta ahora lo más concreto es que el precio del menú que ofrecerán los comedores oscilará entre los cuatro y cinco euros por alumno.
Soto confirmó que ayer envió la petición a Sanidad para obtener la autorización que permita a la empresa de catering que ya se ocupa de distribuir la comida en los colegios pueda hacerlo también durante los meses de julio y agosto.
Desde la Junta, su portavoz, José Antonio de Santiago-Juárez, apeló ayer a la autonomía del Ayuntamiento de Valladolid, gobernado por PSOE y Toma la Palabra, en su decisión de abrir los comedores en verano en dos centros escolares y defendió que el modelo del Ejecutivo autonómico es de «éxito» y no se ha cuestionado.
De Santiago-Juárez dijo que el Ayuntamiento «puede hacer lo que crea más oportuno» en base a la autonomía municipal, pero recordó la gestión a través de la Red Centinela de Protección para cubrir las funciones de los comedores escolares en verano y evitar su apertura.
«Que no señalen a la Junta», indicó el portavoz y añadió: «No nos vamos a salir de nuestro modelo, si el Ayuntamiento de Valladolid quiere hacer otras cosas, que las haga desde su autonomía», precisó, para recordar luego que «nadie puso pegas al modelo, que funcionó». Como ejemplo citó el Ayuntamiento de Madrid, presidido por Manuela Carmena.