Las ventas del comercio tradicional remontan un 2% tras 6 años negros

El comercio de proximidad también empieza a atisbar signos de reanimación tras las duras penurias de la crisis. Durante 2014, las ventas de las tiendas vallisoletanas subieron un 2%, lo que se tradujo en el mismo porcentaje en la creación de empleo. El año cerró con 450 trabajadores más, 22.400 en total. La percepción positiva la comparten seis de cada diez comerciantes de la ciudad, para los que los últimos 12 meses fueron mejores que los de 2013.

El ascenso en las ventas, aunque leve, rompe la tendencia negativa iniciada en 2008. Del mismo modo, recobra vida el sector del equipamiento del hogar, lastrado en los últimos años por la crisis de la construcción y la llegada de Ikea. «No podía caer más bajo», apuntó ayer el presidente de Avadeco, Alejandro García, durante el balance de 2014.

Además, crecen casi todas las divisiones, especialmente la alimentación, un 4%, y la ropa deportiva, que se ha frenado en los últimos meses, probablemente a consecuencia de la llegada de Decathlon a Arroyo.

A cambio, las transacciones de moda se han estancado, especialmente lastradas por el retraso de la llegada del frío, que dificultó las cuentas de octubre y noviembre, cuando abrigos, botas y jerseys esperaron en las baldas a unos clientes que no llegaban. Tampoco el Black Friday del pasado 28 de noviembre resultó satisfactorio. Según Avadeco, el día de precios bajos importado desde Estados Unidos pilló desprevenidos a bastantes comercios tradicionales frente a las grandes empresas. Por último, el puente de diciembre y la apertura de grandes superficies redujo la venta a mediados de diciembre dentro de la campaña navideña.

Con 2015 llegaron las rebajas, aunque la desregularización de las fechas no ha beneficiado el inicio de la campaña en el pequeño comercio. El 44% de los pequeños empresarios consideran que esta campaña será peor que la del año pasado y el 40% apuestan que será similar, según la encuesta del Observatorio del Comercio de Valladolid de este mes.

Sin embargo, con la perspectiva puesta un poco más allá, un tercio de los comerciantes piensa que el primer trimestre del año las ventas en general mejorarán, un diagnóstico con el que coincide García Pellitero, que mira a este año con optimismo.

Respecto a los obstáculos que encuentra en su camino el comercio tradicional, el presidente de Avadeco apuntó al auge de las ventas por Internet, personalizada en las grandes compañías. «Amazon o Inditex hacen mucho daño», se quejó. Otros enemigos permanecen desde hace más tiempo, aunque su efecto parece aumentar. Son la competencia de los centros comerciales y las aperturas de domingos y festivos, una estrategia esta última que no convence a las pymes de la ciudad. Los datos son contundentes: el 83% de los encuestados califica las ventas de esos días como malas y el 97% piensa que el número de feriados de apertura debería reducirse.

«Mantenemos cuatro domingos abiertos y solo compensan los de antes de Navidad y Reyes, los otros dos no abre ya ni el 60% de las tiendas», argumentó, incidiendo en que ni siquiera a aquellos empresarios sin empleados y con una superficie pequeña que tienen libertad de apertura les compensa. «Hay que convencerse de que no tenemos que crear la necesidad de comprar los domingos», insistió sobre un tema siempre polémico, que afecta a los ayuntamientos. García Pellitero repitió su deseo de volver a los 12 festivos permitidos, aunque se teme que algún municipio, pensando probablemente en Arroyo, «quiera ampliarlo».