Las multas caen un 10%

Será por un menor uso del coche, por el miedo a las multas, porque los conductores ya saben dónde están los radares, por una mayor prudencia al volante o por una mezcla de todas estas circunstancias, pero lo cierto es que en el recién terminado 2014 las multas de tráfico por infracciones de todo tipo cayeron un 10% en la ciudad.

Desde luego no es por un menor celo por parte de la Policía Municipal. El operativo de radares y medios para cazar al infractor, incluido aquí el trabajo de vigilancia de los agentes municipales, fueron los mismos que en 2013: seis radares fijos, dos móviles, 7 sistemas de foto para los que salten el semáforo en rojo y dos vehículos informatizados de denuncias. Y las calles en las que está implantada la zona azul para aparcamientos, la ORA, son las mismas. Y, sin embargo, durante el pasado año fueron 11.903 menos las denuncias tramitadas: 98.732 frente a 110.635 de 2013. Un 10%menos en números redondos.

Claro que si se compara con 2012, cuando se tramitaron 131.624 denuncias, el descenso se incrementa hasta un 24%. Fuentes de la Policía Municipal no encuentran una razón especial que explique esta caída de las denuncias, salvo que confirma una tendencia que se observa en los tres últimos ejercicios.

Los datos aparecen en el balance estadístico de la Policía Municipal correspondiente al pasado año y revelan que, pese a este sorprendente descenso, hay cosas que no cambian. Es el caso de la primacía que mantienen las denuncias por infringir la normativa de la ORA, ya sea por excederse en el tiempo abonado por aparcar en zona azul o por hacerlo sin el tique, las más habituales. Las denuncias de la ORA representan el 46% del total, casi la mitad, un porcentaje muy similiar al de años precedentes.

Los seis radares fijos sumaron en 2014 un total de 20.621 denuncias por exceso de velocidad, pero uno solo, el instalado en la Avenida de Burgos, acaparó un tercio de las tramitadas: 8.482 de 20.621, lo que supone el triple que el segundo, el del Paseo de Zorrilla, con 2.793.

Ésta es otra de las constantes en la estadística de infracciones de tráfico año tras año.

Además de la alta densidad de tráfico que tiene la Avenida de Burgos, el hecho de ser uno de los accesos a la ciudad y, por tanto, lugar de paso de conductores foráneos que desconocen -pese a la visibilidad de la caja que dispara la fotografía- la existencia de un radar puede contribuir a explicar la diferencia con los cinco equipos restantes: el instalado en el Paseo de Zorrilla, el de Isabel la Católica y los de la Avenida de Salamanca, Paseo del Hospital Militar (antes García Morato) y Monasterio San Lorenzo del Escorial.

En el caso de las denuncias por saltarse el semáforo en rojo, 2.693 frente a las 2.802 de 2013, de los siete equipos instalados el que se lleva la palma es el de la Avenida de Soria, con 631 denuncias, seguido del que se encuentra en la Avenida de Salamanca, con 567; calle Don Sancho, 441; Paseo de Zorrilla, 327; carretera de Fuensaldaña, 283, y plaza del Poniente-Rinconada, con 264.

El estacionamiento en doble fila se mantiene como la primera causa de las denuncia impuestas por los dos vehículos informatizados que patrullan por la ciudad, seguida de los aparcamientos en zona de carga y descarga.

En general, los datos reflejan un descenso no sólo de las denuncias, sino también de la siniestralidad por tráfico en general. Así, frente a los cinco fallecidos de 2013, el pasado año sólo hubo que lamentar uno y los heridos pasaron de 98 a 72, 26 menos.

Los informes por accidente, tanto con heridos como con daños materiales, se redujeron en 296 -3.276 en 2013 por 2.980 el pasado año- e incluso los controles de alcoholemia parecen indicar que el famoso eslogan ‘si bebes no conduzcas’ cala en los conductores.

De las 389 pruebas con resultado positivo de 2013 realizadas tanto a raíz de un accidente como de una infracción o fruto de los controles preventivos que se practica de forma rutinaria, el pasado año se pasó a 297.

Los atestados judiciales por accidente se redujeron también de 130 a 43 y fueron 12 los detenidos por cometer un delito contra la seguridad del tráfico