CAMPAÑA EN TIMES SQUARE
Javier Bardem exige un tratado global sobre los mares en la ONU
El actor español participa en una serie de acciones de Greenpeace
Con motivo del inicio de la reunión para debatir sobre el futuro de los mares en la ONU y con el propósito de lograr un tratado global que facilite la protección del 30% de su superficie en el 2030, la oenegé Greenpeace ha realizado en Nueva York este lunes un conjunto de acciones en las que participa el actor Javier Bardem. A primera hora de la mañana, el marido de Penélope Cruz ha protagonizado una sesión de fotos en Times Square, donde la ONG ha proyectado varios mensajes de conciención en las pantallas gigantes.
Las negociaciones del Tratado Global de los Océanos duran ya una década y Bardem se ha dirigido después, en la sala de conferencias de Naciones Unidas, a los delegados de los Estados miembros para insistirles en la necesidad de proteger los océanos. Lo ha hecho junto a la científica ambiental de la Universidad de Nueva York Jennifer Jacquet, la bióloga marina y responsable de la campaña 'Protect the Oceans' de Greenpeace Alemania Sandra Schottner; la estratega política de Greenpeace Internacional, Sofia Tsenikli y la fundadora de Women4Oceans, Farah Yasmin Obaidullah.
Bardem, que participó en una expedición de la onenegé a la Antártida con su hermano Carlos en enero del año pasado, ha recordado que los océanos están "al borde del colapso". "Todos tenemos nuestra parte de culpa. Por eso ahora también todos tenemos que asumir nuestro papel asegurando un Tratado Global de los Océanos fuerte y sólido", ha reclamado.
Schoettner ha insistido en que ahora los Gobiernos tienen una "oportunidad única" para reunirse y abordar el "saqueo y la destrucción de los océanos y la pérdida masiva de vida marina". Así, considera que lo que ocurra en esta reunión, marcará el destino de los océanos, que se enfrentan a más amenazas que nunca, desde la sobrepesca hasta la extracción de petróleo, la minería de fondos marinos y la contaminación por plásticos.
"Necesitamos este tratado para conseguir la creación de una red de santuarios marinos en todo el planeta, libre de actividades humanas dañinas, que ayude a evitar los peores efectos de la crisis climática y salvaguarde la vida silvestre", concluye la experta de Greenpeace.