Diario de Valladolid

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Para todo el mundo los Oscars son el mayor reconocimiento que cualquier profesional del cine puede obtener a lo largo de su carrera. Son, sin duda, la mayor distinción que otorga la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en las distintas ramas de la industria del cine. Hay Oscars de todo tipo: a la mejor película, al mejor guión original, a la mejor actriz, al mejor Director…y todos son el mayor símbolo del éxito cinematográfico.

En Castilla y León, sin embargo, desde que se han enquistado las fallidas primarias socialistas convocadas por Luis Tudanca, los Oscars que empiezan a ganar cada vez más protagonismo, por encima de cualquier premio cinematográfico, son López y Puente. Tan meritorios Oscars no pueden evitar que, de un tiempo a esta parte, haya un olor a cuchilladas por la espalda en la sede de los socialistas de Castilla y León que echa para atrás. Malos tiempos para la lealtad corren entre las filas socialistas. Normalmente en tiempos de congresos todo se revoluciona y nadie se fía de nadie pero cuando, además, al jefe empieza a ponérsele cara de cadáver político, las navajas campan a sus anchas y los buitres, que huelen la sangre, empiezan a revolotear con el móvil y declaraciones públicas. Quienes ayer mostraban su profunda admiración por el líder regional empiezan a poner distancia sin perder la sonrisa ni un ápice de amabilidad, afecto y reconocimiento.

Los primeros en romper el hielo fueron los de El Bierzo con Olegario Ramón, Presidente del Consejo Comarcal, al frente, defendiendo a capa y espada la decisión de Ferraz de posponer las primarias, desde el cariño, por supuesto, hacia Luis Tudanca. Se ha abierto la veda y, desde Madrid, la Ministra Ana Redondo ya ha marcado el camino para quienes quieran seguir vivos después del congreso federal. “El partido tiene sus reglas y hay que acatarlas”, dixit. Más claro agua. A partir de ahora todos tendrán que decidir entre lealtad y pragmatismo o, como dice el Alcalde León, los silloncitos y los suelditos.

Entre tanto movimiento los Oscars de Castilla y León siguen sin pronunciarse, al menos de forma directa, apostados en la sombra con esa actitud contemplativa de quien pretende mover los hilos sin dar ni la cara ni un paso en falso. Medir los tiempos y no cagarla es fundamental en estos momentos pero todo el mundo en la sede regional del PSOE les mira de reojo en la distancia y asume que, ahora mismo, los Oscars más importantes no son precisamente los de Hollywood.

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