Abascal, Mañueco y Navaja
PARECE MENTIRA que, a su edad y con tanta mili, Abascal no conozca a Pedro Navaja, que no es el portavoz del PSOE en el consistorio vallisoletano, así apodado por su ex alcalde Puente y otros figuras municipales. Sorpresas te da la vida / la vida te da sorpresas, dice la canción de Navaja, no el socialista de Valladolid, el otro cantante. Si rompe el gobierno de coalición a cuenta del hospedaje de 21 muchachos de tez morena sin familia ni dios que los ampare, corre el riesgo de romper algo más. Romper el gobierno a estas alturas del partido no inquieta a Mañueco más allá de lo que jamás inquieta a Mañueco. Es cuestión de tirar con lo que hay. Y lo que hay es un presupuesto, el más grande de la historia, de sobra. El resto, un alicatado. De producirse la cacareada ruptura, que hoy tendría que cuajar si es que Abascal era mano y llevaba tres reyes y un pito en el órdago, está por ver que todos los consejeros abandonen el gobierno. Está por ver que alguno, o más de uno, no se queden al calor que proporciona la Junta de Mañueco. Fuera, aunque sea julio, hace frío. Ya lo decía el sabio Posada: la política es un ascensor que sube y baja, lo importante es estar siempre dentro. Posada no salía ni a mear, incluso cuando el ascensor bajaba al sótano, en los tiempos caninos del PP. El gobierno no lo rompe. Pero sí corres el riesgo de romper el partido, a un año de la cita electoral. Un año. Mañueco no va a adelantar, si eso es lo que supone Abascal que propiciará con su movimiento. No va a adelantar ni las vacaciones. Pero alguno en Cortes si tendría que renunciar a los billetes para hacer hueco a la nómina de Gallardo. Y tal vez dos, porque está Veganzones. No es cuestión de que vuelva ahora al CES a organizar desbocado el diálogo social con los sindicatos. Un miedo que congela el alma y las poltronas recorre estas horas de incertidumbre a los altos, y los bajos cargos de VOX en la Junta. Tudanca es capaz de tender la mano. Acabará con artrosis de tanto esfuerzo como hace.