La inoportuna incontinencia verbal de Ronaldo

Ronaldo Nazario ha vuelto a meterse en un jardín, en otro jardín. Su incontinencia verbal (y eso que habla poco, muy poco) le lleva a ser señalado y ser blanco de las críticas de una afición que no comprende nada. ¿Cómo se pueden decir a los cuatro vientos que va a vender el Real Valladolid en un momento como este en el que ‘su’ Real Valladolid (porque no deja de ser suyo o... al menos de un grupo financiero en el que ejerce de cabeza visible) se está jugando el ascenso? Incomprensible. Decir en estos momentos que su próximo e inminente objetivo es vender el club blanquivioleta es sinónimo de desestabilizar o cuanto menos generar debate y crispación en la ciudad, en las instituciones y entre una afición que sigue flagelándose ante tanto despropósito.

El presidente del Real Valladolid, prácticamente ‘invisible para los medios locales’ no habla pero cuando lo hace no deja a nadie, absolutamente a nadie indiferente. La salida de tiesto de una persona insegura que no mide sus palabras es la mejor justificación de sus anonimato en Valladolid. La lió en los ‘desayunos de la APDV’ cuando dijo por sus santos... que ‘iba a cambiar el escudo’. La lío cuando un año después y tras ver descender a su equipo en gran parte por su inmovilismo, ceguera y pasividad para tomar decisiones, cargó contra el alcalde, mordiendo descaradamente su mano diciendo como si nada ‘donde dije digo, digo Diego’. La lió cargando contra la afición, que llena el estadio, tildándola de ‘ultra’ metiendo indistintamente a todos en el mismo bote. Y la lía ahora que acaba de hacer caja con la venta de su otro club, el Cruzeiro diciendo que quiere vender ya el Real Valladolid.

Es un secreto a voces que Ronaldo vino a Valladolid a hacer negocio. Ya puso precio al club la pasada campaña teniendo apalabrada la venta pero... el Real Valladolid bajó a Segunda y los 80 millones de euros se esfumaron como no podía ser de otra manera por arte de magia.

El Ayuntamiento, a través de su alcalde Jesús Julio Carnero ha tenido que salir, de forma brillante al rescate afirmando que ese Convenio, ya eterno, con el Real Valladolid y todavía por firmar con el Proyecto de la Ciudad Deportiva y la reforma del Estadio seguirá adelante. Pero casualidades de la vida el tiempo pasa y los permisos para el inicio de las obras siguen sin llegar.

En tiempos en los que el libre mercado manda, como bien dice el alcalde, Ronaldo, propietario, es libre para vender ‘su’ Real Valladolid. Pero... ¿Si el juguete se rompe por su incontinencia verbal? Es mejor tener la boca cerrada y parecer estúpido que abrirla y disipar la duda. Ronaldo ha demostrado que no solo no sabe callar sino hablar. a destiempo como ahora y totalmente fuera de lugar. Pero ya lo dijo Hemingway, ‘se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar’. Porque a veces más vale callar y pasar por tonto, que abrir la boca y demostrarlo. El presidente del Real Valladolid, con sus palabras en Brasil, posiblemente sin darse cuenta, ha vuelto a encender la mecha de la animadversión contra él. Tiempo al tiempo.