El camino judicial de la Diputación de Soria

NO HABÍA otra posibilidad. El camino judicial de la Diputación de Soria se ha iniciado el mismo día en que se convoca el pleno para su constitución y para la elección de su presidente. Habrá mayoría absoluta, que tampoco había duda sobre eso. Lo que no estaba tan claro era si iba a ser a favor del PP o del PSOE. La balanza ha caído del lado de los populares, y eso es lo que los socialistas quieren cambiar utilizando la vía judicial. Pero que nadie se lleve las manos a la cabeza ni haga reproches por esa judicialización, que si el fiel del balanza se hubiera inclinado hacia el lado contrario también habría pasado el asunto a los tribunales, porque igual de claro lo dejaron uno y otro partido, ya que los dos se consideran ganadores en las urnas. El pleno de constitución de la Diputación está convocado para el próximo día 6, pero el PSOE, que ayer recurrió ante la Junta Electoral de Soria (lo que parece un mero trámite, porque no parece que la Junta Electoral provincial vaya a ir en contra del criterio de la central), ya anuncia que en su recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León pedirá medidas cautelares para que no se constituya la institución provincial antes de la decisión del tribunal. Como es conocido, el lío se ha organizado porque la diferencia de votos es tan corta que al contar los votos de los pueblos de menos de 100 habitantes (donde se eligen tres concejales mediante listas abiertas, como las del Senado, y poniendo dos cruces), de una forma sale mayoría absoluta para el PP y de otra sale para el PSOE. La verdad es que la ley no es clara porque se olvidó de esos pueblos y solo menciona a los de «menos de 250 habitantes», pero claro, en los de 100 a 250 se eligen 5 concejales y se ponen 4 cruces. Para hallar los votos por partido, dice la ley que hay que sumar los de los componentes de la lista y dividirlos entre el número de candidatos hasta un máximo de cuatro, lo que coincide con las cruces a poner. Como en los de menos de 100 se ponen dos cruces, la Junta Electoral ha dado la razón al PP y, por analogía, dice que se debe dividir entre dos. Gana el PP, salvo que los tribunales digan lo contrario, que en Aragón, en un caso similar, su Tribunal Superior lo dijo, curiosamente en contra del criterio de los socialistas aragoneses. Aquí, el PSOE defiende lo mismo que afirmó el TSJ maño, y quiere que la división sea entre tres, porque el único divisor máximo citado en la ley es el cuatro. Tal vez Soria se convierta en la provincia que permitió que se aclarara definitivamente la forma de contar votos en los pueblos pequeños, aunque si el TSJ de Castilla yLeón dice lo contrario que el de Aragón, para que se unifique doctrina debe intervenir una instancia más alta. El TSJ de Aragón dejó claro en su decisión que el recurso de amparo debía ser ante el Constitucional. Así que habrá que ver dónde termina el camino judicial iniciado por la Diputación soriana. Pueblos de menos de cien habitantes seguirá habiendo, porque en eso hay relevo. La cantera está en los de 100 a 250.