Astra Zeneca, y en esto llegó la tercera diócesis
Hay que recordar el alboroto que montaron los de la cosa de la Sanidad de Castilla y León con la segundadosis de Astra Zeneca, cuando decían que Astra Zeneca dejaba a algunos un poco tarumbas. El dúo de la Sanidad de la Junta, en ese afán cotidiano por llevar la contraria a alguien, aunque sea a sí mismos, dijo que había que repetir con Astra Zeneca a toda costa y que lo de mezclar con Pfizer era poco científico. Y en éstas llegó la tercera diócesis. Ahora no hay Astra Zeneca y vale la Pfizer sin consentimiento informado. Y esta es la dinámica constante, diaria y habitual del negociado de la Sanidad de Castilla y León. Donde dije Astra Zeneca, hasta el túetano, digo Pfizer, porque me peta y no tengo de la otra, y me quedo más ancha que larga y esto con la reforma a tope que me pilla el camión de la basura y el adelanto electoral. Chincha. Este es el rigor de la Sanidad nuestra de cada día. Es que vamos a aplicar la reforma que quería aplicar Yo misma conmigo misma. Es más, la estamos consensuando con el diálogo de todos que los que están de acuerdo, o no, que son muchos, muchísimos, pero ya la estoy aplicando porque el consenso y el diálogo es monólogo, conversa con el hombre que siempre va con ella, quien habla sóla espera hablar a Dios un día. Dios y yo, mayoría absoluta. Así rige la regeneración. Y ahora vamos a hacer una gira con medios amigos y dóciles para regenerar la imagen después del vapuleo y los aspavientos de Cortes. Tenemos hasta directora de Salud Pública, que como somos una Comunidad austera, no tuvimos en año y medio de pandemia. Ahora la tenemos para charlitas y charlotadas. Otro giro a la política comunicativa de Sanidad que no para de recibir medallas de chocolate de una publicación médica que sólo leen ellos. Estamos en racha, dice la mejor en el chat gubernamental en pleno vigor de la quinta ola.