Atropello en Simancas
EL TRAMO de la autovía de Castilla, que discurre entre Venta de Baños y Valladolid, reúne en su trazado tal cúmulo de disparates y deficiencias técnicas, que a semejanza de lo ocurrido con el urbanismo vallisoletano de posguerra, ha acabado convirtiéndose en emblema de aquello que nunca debiera haber perpetrado la ingeniería asfáltica. En realidad, los destrozos se prolongan hasta la curva que ciñe el paso por Simancas, que ahora el ministerio de rodaduras pretende ampliar con el mordisco de un tercer carril.
Al margen de algunas ocurrencias más o menos disparatadas, como la construcción de un túnel para el paso de la autovía bajo el castillo, parece que se va imponiendo la lógica de exigir la variante que aleje el tráfico del pueblo y permita el trazado recto hacia las Ventas de Geria. Lo que ya no puede volver a permitirse a los arrogantes proyectistas de Fomento es atropellar el patrimonio en Simancas, como están haciendo a un coste disparatado en la autovía León-Valladolid a su paso por Lancia y pretenden repetir con el monasterio de Valbuena junto al Duero.
Todavía tienen pendiente en la autovía de Castilla el arreglo de la avería de Dueñas, donde los ingenieros del diecinueve construyeron el murallón del Canal y desviaron el Pisuerga. Luego, el desdoblamiento en los años ochenta dejó la autovía de Castilla como una ratonera, con una cosecha de muertes que ha impedido olvidar la peligrosidad de la vieja carretera. En ese tramo y hasta Valladolid se suceden los mordiscos a las sirgas del Canal de Castilla.
Semejante desparpajo en los atropellos asfálticos ha podido alentar en los proyectistas del Ministerio de Fomento el disparate de pretender asestar un tajo mortal al archivo nacional y al conjunto histórico de Simancas, invadiendo su área de protección. Entiendo que la Comisión de Patrimonio nunca podrá aprobar semejante atropello, aunque sorprende otra vez más la osada lejanía de los proyectistas del ministerio, quienes desde su ventanal de la Castellana no reparan ni en montes ni en morenas.