Un freno a la caída del paro con expectativas de aumento
SEPTIEMBRE suele ser un mes de transición entre un habitual verano con descensos del paro y la llegada del otoño e invierno, que traen aumentos del desempleo y balances negativos para el mercado laboral de Castilla y León. El mes pasado marca la tenencia habitual.El paro creció en 1.423 personas y la afiliación a la Seguridad Social retrocedió en 1.172.
Lo más preocupante de los datos del paro registrado en las oficinas del Ecyl durante el mes pasado es que todo el desempleo se ceba en las mujeres y los jóvenes menores de 25 años son otro de los colectivos más castigados.
La precariedad sigue siendo la norma de los contratos en Castilla y León y un volumen superior al 54% de los parados de la Comunidad se ha quedado ya sin prestación. Que sólo el 7,7% de los nuevos empleos sean indefinidos no es una buena noticia y que el 37% de esos puestos de trabajo sean a tiempo parcial revela la poca calidad del empleo creado.
Lo más preocupante es que septiembre abre ya un período habitual de incremento del paro, que se extenderá posiblemente hasta el inicio de la primavera. Los 173.361 desempleados registrados en las oficinas del Ecyl serán más en los próximos meses si se mantiene la tendencia de casi todos los años.
Todas las administraciones deben tomar nota, porque la recuperación está siendo insoportablemente lenta en comparación con el elevado aumento del Producto Interior Bruto y el empleo creado es temporal y a tiempo menor del que desearían los trabajadores contratados.
Aesto se suma el hecho de que la caída del desempleo interanual es cada vez menor y aparecen síntomas de mayor castigo a las mujeres y a los más jóvenes.
Estas expectativas hacen necesario tomar medidas con tiempo, verificar si hay programas o planes de empleo que van más retrasados de lo considerado razonable y analizar si las estrategias económicas son las más adecuadas para la creación de empleo de calidad.
La última reunión del Consejo de Diálogo Social constató que hay programas que no están teniendo la demanda esperada y hay fondos que no llegan a invertirse. Es necesario abordar una doble reflexión al respecto: analizar si hay colectivos desprotegidos y abordar si desde el punto de vista económico hay sectores más oportunos para apoyar la inversión.
Los manifiestos desequilibrios provinciales deben ser también objeto de estudio para evitar que la recuperación se centre en unos territorios más que en otros.En definitiva, estamos a tiempo de tomar medidas para que el paro no se dispare en un otoño e invierno con demasiadas incertidumbres.