Rubén Santos se viste de plata

El equipo español de pesca de la modalidad de salmónidos mosca se proclamó subcampeón del mundo en la XLIII edición del campeonato del Mundo de la modalidad disputado en la región de Occitania (Francia), del 23 al 30 de junio.

En la selección nacional se encontraba el pescador leonés de La Bañeza, Rubén Santos Becerro, que logró con la selección su octava medalla en competiciones internacionales y que contribuyó, con tres buenas mangas de pesca, para colgarse una plata muy trabajada en un mundial que pasará a la historia por el clarísimo dominio de la selección de Francia, y por la dureza de los escenarios elegidos para pescar, ya que algunos de los tramos elegidos, en plenos Pirineos, había que ir andando hasta sus lagos, cargando con todo el equipo, por un tiempo cercano a las dos horas de caminata.

Rubén Santos Becerro en esta ocasión disputó un mundial que fue de menos a más pues el primer día concluía en el puesto 77º recuperando poco a poco en las cinco mangas de que las que constó el mundial posiciones hasta concluir en el puesto 39º en una clasificación general donde estaban los 120 mejores pescadores del mundo del sedal pesado, representando a un total de 21 países.

Entre los deportistas españoles el mejor clasificado fue el asturiano Andrés Torres, en la quinta plaza, seguido por el coruñés David Arcay en el puesto noveno, el vasco Julen Aguado en el puesto dieciséis, y el catalán Jordi Oliveras que concluyó en la plaza vigesimosegunda.

Rubén Santos logro su cuarta medalla mundialista - tiene otras cuatro en campeonatos de Europa-, alcanzando de este modo su segunda medalla de plata por equipos, a la que hay que sumar la medalla de oro alcanzada por España en el mundial disputado en Asturias, y el bronce individual que logró en esta misma cita mundialista que hace tres años ganó el combinado español.

La selección nacional con este resultado vuelve a subir al pódium mundialista, por noveno año consecutivo, y reafirma las palabras del propio presidente de la Federación Española de Pesca y Casting, José Luis Bruna que aseguró a este diario EL MUNDO DE CASTILLA Y LEÓN que, «el deporte de la caña en nuestro país es la actividad deportiva que más medallas internacionales cosecha entre todas las federaciones nacionales, lo que sitúa nuestros pescadores entre los más fiables del mundo con la caña de la mano y prácticamente en cualquier modalidad».

El mundial fue ganado de forma muy clara por el equipo francés, que consiguió meter a tres de sus cinco pescadores entre los tres primeros clasificados de la general y logrando doblar en puntos al equipo subcampeón. Francia preparó durante cuatro años muy concienzudamente este campeonato del mundo y fue profeta en sus aguas.

El mundial en el apartado individual fue ganado, por segundo año consecutivo, por Pier Kuntz, por delante de su compañero, Sebastián Delcor y del también pescador francés Gregoire Juglarett, un triunfo sin paliativos de forma individual y por equipos y en una final donde el equipo de Estados Unidos fue tercero.