Dos altos cargos de Adif repiten detención
afael Rodríguez y Jaime García ya fueron arrestados en el 2004 en la 'operación Yogui'
RAFAEL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ
Fue director de Alta Velocidad de la Zona Nordeste, máximo responsable de las obras del AVE a Barcelona, primero, y a Francia, después. Estuvo desempeñando cargos directivos en Adif bajo tres ministros de Fomento distintos: los socialistas Magdalena Álvarezy José Blanco y la popular Ana Pastor. Fue detenido ya en mayo del 2014, en la primera operación que se realizó sobre los presuntos sobrecostes en la estación de la Sagrera del AVE. Según el último informe de la Guardia Civil sobre este proceso, que tramita el Juzgado de Instrucción número 9, este exalto cargo de Adif "conocía al detalle el estado y situación de la obra, así como la inclusión de importes correspondientes a mediciones de obra no ejecutada realmente dentro de las certificaciones y, especialmente, en el sector de la Sagrera".
Rodríguez Gutiérrez fue apartado de su cargo cuando estalló el escándalo en el 2014, en la denominada 'operación Yogui', después de que la jueza decretara su prisión bajo fianza. Un juzgado, sin embargo, obligó a readmitirle. A pesar de ello, la aparición de nuevas pruebas de supuestos sobornos llevó a Adif a mostrarle otra vez la puerta de salida de la empresa.
JAIME GARCÍA-GERMÁN LÓPEZ-BELMONTE
Subordinado y hombre de confianza de Rafael Rodríguez, según los investigadores. Exgerente de Infraestructuras de Adif. También fue detenido en el 2014. La Guardia Civil sostiene, en referencia a esaoperación, denominada Yogui, que este directivo del órgano gestor de infraestructuras negociaba con los responsables de la empresa Corsan, una de las firmas adjudicatarias implicadas en esa presunta malversación de fondos, las mediciones a incluir en las certificaciones de obras en el sector de la Sagrera.
La Agencia Tributaria ha descubierto un importante incremento del patrimonio de García-Germán. En un informe señalaba que en el 2007 el exalto cargo de Adif (fue apartado de sus responsabilidades directivas) se compró dos embarcaciones por un importe de 54.582 euros, una cantidad que "excede [sus] rendimientos de trabajo". Los investigadores añadían a esa adquisición la compra, en el mismo año, de un inmueble de 60.000 euros. Hacienda también detectó sospechosos movimientos económicos en las cuentas corrientes de sus padres. Además, este investigado supuestamente recibió regalos en forma de estancias en hoteles de lujo, como el Jerone y Sant Reis de Aspen (Colorado, Estados Unidos).