TRAS LA 'OPERACIÓN PÚNICA'
Los dirigentes del PP vasco claman en Twitter contra los casos de corrupción en su partido
"Nos hemos jugado la vida por defender estas siglas", escriben varios políticos de Euskadi bajo la etiqueta #Tantaluchaparaesto
Varios concejales y dirigentes del PP vasco se rebelaron este martes en Twitter contra los casos de corrupción destapados durante los últimos días en su partido, con la 'operación Púnica' y con el escándalo de las tarjetas b. Entre la "indignación" y el "bochorno", en las últimas horas muchos cargos y compañeros de carnet han expresado su "rabia" contra los "golfos" que se han aprovechado de su cargo bajo las siglas del Partido Popular.
En este sentido, también el portavoz del PP en el Parlamento vasco, Borja Sémper, admitió este martes que en su partido están intentando ver cómo afrontan "tanta basura con equilibrio". "Es un ambiente lúgubre, es una ambiente triste, un ambiente de asco, de profundo rechazo, de tristeza. Estamos viendo cómo afrontamos tanta basura con equilibrio porque a uno sólo le salen palabras gruesas de la boca cuando conoce que compañeros de militancia se han aprovechado de la política para enriquecerse", ha reconocido.
El parlamentario cree que se "necesita muchas más contundencia y mucha más velocidad". "Es como si no entendiéramos el grado de cabreo ciudadano que existe en estos momentos en la calle, es como si no fuéramos conscientes muchas veces los políticos", ha expresado.
#TANTALUCHAPARAESTO
"Los corruptos no son compañeros, son gentuza", escribió Iñigo Manrique, de la junta del PP en Guipúzcoa, bajo el 'hashtag' #Tantaluchaparaesto, una iniciativa espontánea "fruto de la indignación y el dolor", según fuentes del partido.
"Asco. Corrupción=Cáncer. Imprescindible Operación Quirúrgica. Después de años luchando contra el terror siento vergüenza", apuntó Juan Carlos Cano, portavoz de las Juntas Generales de Guipúzcoa.
Ramón Gómez Ugalde, ha sido otro de los políticos del PP indignados. En su cuenta de Twitter dijo: "O acabamos con tanta gentuza o los ciudadanos acabarán con nosotros (...) Estoy cabreado, asqueado, abochornado y sobre todo dolido".