Tierras Altas busca el relevo de sus pastores con la formación

Tres meses de prácticas como pastor le han valido a Carlos Redondo para tener más que claro que quiere dedicarse a la ganadería y en su casa, en Tierras Altas. Además, sus mentores, los hermanos Pérez de Navabellida, están a punto de jubilarse después de toda una vida como pastores, hasta ahora sin relevo generacional, de modo que a sus 32 años a Carlos se le ha abierto una oportunidad para conseguir su objetivo gracias a esta iniciativa que ha desarrollado la Mancomunidad de Tierras Altas, que lleva años empeñada en que la comarca sea sostenible medioambiental y económicamente para garantizar su futuro.

Incluido en el Plan Integral de Desarrollo Inteligente y Sostenible de las Tierras Altas (Pidista), en este curso sobre el pastoreo ha participado también Asier Calleja, quien de momento está estudiando Ingeniería Agrónoma en Pamplona después de hacer un módulo superior de Formación Profesional sobre Ganadería, con el mismo propósito que Carlos de quedarse como ganadero en Tierras Altas.

Desde el 8 de julio hasta el 8 de octubre estos dos jóvenes de Tierras Altas han realizado las prácticas como pastores junto a dos expertos ganaderos de la comarca para garantizar así el relevo generacional de este oficio que antaño fue el principal medio de sustento de esta zona de la provincia. Tori Sáenz, pastora senior de Los Campos, ha estado enseñando a Asier, mientras que Ricardo Pérez, de Navabellida, ha sido el profesor de Carlos. Da la casualidad de que éste además es el único trashumante que queda en la comarca de Tierras Altas, que lleva la explotación junto con sus hermanos José María y Basilio. De lunes a jueves el trabajo se realizaba con el ganado, de la mano de los pastores senior, mientras que los viernes se formaban en informática y tareas de gestión y papeleo, así como de tramitación administrativa en la sede de la Mancomunidad de Tierras Altas, en San Pedro Manrique.

Carlos ha ‘vivido’ desde pequeño el oficio de ganadero en su pueblo, Los Campos. Cuenta que ahora mismo dos tíos y dos primos tienen animales. Ahora, gracias al curso de pastoreo, él se plantea seguir como pastor relevando a los hermanos Pérez de Navabellida, que ya están pensando en su jubilación. Lo que ha desechado directamente es la trashumancia que realizan estos ganaderos, los únicos de Tierras Altas en estos momentos. «Si tienes familia es muy complicado pasar seis meses en un sitio y otros seis meses en otro», señala. Asegura que se le ha hecho muy corta la formación, pero ha aprendido muchas cosas sobre el manejo de las ovejas.

Asier Calleja es el otro pastor junior que ha aprendido sobre el oficio. Asegura que «desde siempre» ha querido ser ganadero, y aunque había trabajado con otros tipos de animales, nunca con el ovino y el pastoreo. «Sí había estado con ovejas pero estabuladas. Esto es nuevo».

Lo que más le gusta es el contacto con la naturaleza y los animales, pero de momento quiere seguir formándose: «Tengo que acabar la carrera, y cuando termine lo que tengo claro es que quiero dedicarme a la ganadería y quedarme a vivir en mi pueblo, San Pedro Manrique». De hecho, ya está tomando contacto con varios pastores que a medio plazo se jubilarán.

Lo cierto es que el relevo generacional es urgente en el pastoreo, un gremio envejecido que jubilará al 57% de sus profesionales en los próximos años. Ahí es donde entra el proyecto Pidista de la Mancomunidad de Tierras Altas, que busca mejorar la calidad de vida en la comarca a través de iniciativas que fomenten la sostenibilidad, la innovación y el desarrollo económico y se convierta en un territorio atractivo y próspero para todos.

«Uno de los aspectos más importantes era transmitir el conocimiento de uno de los oficios de larga tradición en la zona y que no encuentra interesados en seguir», explica Mónica García Fernández, técnico de Innovación Territorial y responsable del programa de becas de relevo generacional de Pastores Senior a Pastores Junior, iniciativa que resultó beneficiaria de la Convocatoria de Subvenciones para la Financiación de Proyectos promovidos por Entidades Locales para la Innovación Territorial y la Reactivación de la Actividad Socioeconómica y la Lucha contra la Despoblación promovida por la Dirección General de Políticas contra la Despoblación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en la anualidad 2022 (Pidista I) y en la anualidad 2023 (Pidista II).

El curso, financiado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico estaba dirigido a cualquier persona en edad activa.

Para completar esta formación, la Mancomunidad de Tierras Altas incorporó al Programa de Relevo Generacional de Pastores un nuevo curso sobre el emprendimiento y las competencias digitales. «Es algo necesario hoy en día, no vale con saber pastorear», indica Mónica García.

Una actividad que se realizó a través de la Federación de Organizaciones Empresariales Sorianas (FOES) sobre ‘Conceptos básicos en emprendimiento, gestión de empresas y competencias digitales’, con una duración de 25 horas para acercar a este gremio a las tecnologías digitales y poder, así, interactuar con las distintas administraciones en los trámites online necesarios para su desarrollo profesional.

Además, la Mancomunidad ha contratado a una consultoría externa un estudio sobre la ganadería extensiva en Tierras Altas para tener un diagnóstico y ver las posibilidades de futuro o cómo se les puede ayudar a los ganaderos que hay en estos momentos para continuar con el oficio. «Se van a ocupar de contactar con los pastores, con los alcaldes de la comarca y con las distintas administraciones para luego analizar las debilidades y las fortalezas del sector», añade la coordinadora del curso.