Las Opas señalan el sobreprecio de abonos sintéticos
La Alianza UPA-Coag denuncia que los fabricantes han aumentado sus beneficios más de un 400%
Las Organizaciones Profesionales Agrarias (Opas) cifran en 500 millones de euros el sobreprecio que han pagado los agricultores de Castilla y León por los abonos sintéticos desde que se dispararon los precios. Así, la Alianza UPA-Coag denuncia que mientras los agricultores «se arruinan» por el precio de los fertilizantes, sus fabricantes han aumentado los beneficios «más de un 400%» .
La Opa cita un informe de dos organismos internacionales de defensa de la biodiversidad, que denuncia que los nueve fabricantes que copan el mercado mundial «obtendrán 57.000 millones de dólares de beneficio en 2022». Y es que los NPK estabilizados (los nitrógeno-fósforo-potasio más comúnmente utilizados) «se han disparado últimamente otro 20% , hasta alcanzar los 800 euros la tonelada, y los nitrogenados han vuelto a subir otro 25% hasta los 750 euros por tonelada. No obstante, «la contención del coste del gas y de la electricidad suaviza la subida de precios de los fertilizantes también en los mercados de nuestra región», señalan desde la Alianza.
«El precio final de los fertilizantes se ha disparado hasta el punto en que algunos agricultores no pueden sembrar o están sembrando sin fertilizar porque no pueden pagarlos, se une la especulación», añaden en la organización. Ese es el otro factor que influye, de manera decisiva, en el aumento de los precios de los fertilizantes: las ganancias de las empresas que los fabrican. «El mercado mundial de los fertilizantes, que se estima alcanza un volumen anual de 200 mil millones de dólares, está controlado por tan sólo nueve empresas, de las cuales sólo cuatro de ellas controlan el 33% de toda la producción de fertilizantes nitrogenados», explican desde la Alianza.
El coste se ha triplicado desde la pandemia. Y aunque parezca mentira, «la lógica mercantil ha funcionado incluso dentro del huracán: las empresas han ido trasladando (con generosos márgenes, por lo que se ve) los incrementos del coste de sus insumos a los precios finales de producto (algo que no pueden hacer los agricultores) y el resultado es que, tras la pandemia, las nueve empresas que dominan todo el mercado mundial de fertilizantes han aumentado sus beneficios un 440% .
Los datos han sido calculados por las organizaciones internacionales de defensa de la biodiversidad alimentaria Grain e Institute Agriculturae Trade Policity . Y sus fuentes son las cuentas de resultados entregadas por las propias empresas. El informe elaborado por estas organizaciones llamado La trampa de los fertilizantes estipula que las nueve firmas aludidas terminarán este ejercicio con un beneficio de 57.000 millones de dólares, mientras que en 2020 la ganancia fue de 13.000 millones .
No en vano, solo los agricultores de los países que conforman el G-20, habrán pagado por los fertilizantes esenciales, esta campaña y la anterior, 21.000 millones de dólares más que en 2020.
«Los agricultores de Castilla y León hoy por hoy están abonando a pérdidas». señalan en la Opa. «Esto es, con los precios actuales de cultivos como cereales, perderían dinero. Queda la esperanza de que en la época de recolección se incrementen lo suficiente para que haya beneficios», concluyen.