Impulso a la mejora de regadíos en León, Palencia y Zamora

La penúltima reunión del Consejo de Ministros de la anterior legislatura, aún en funciones, llevó buenas noticas al campo de Castilla y León. No se ha cumplido un mes desde el 20 de diciembre, cuando el Ejecutivo aprobó la inversión en la modernización de diez infraestructuras agrarias de cuatro Comunidades Autónomas, cinco de ellas repartidas por las provincias de León, Palencia y Zamora. La partida total superará los 74 millones de euros.

Las nuevas actuaciones serán cofinanciadas por las comunidades de regantes y, en el caso de Castilla y León, también por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader). Se trata de las instalaciones de las comunidades de regantes del Canal Alto Villares, de Presa de la Tierra y de Velilla, las tres en la provincia de León; del Pisuerga en Palencia y del Canal de San José, en Zamora.

El Gobierno central autorizó, así, la suscripción de una tercera Adenda al Convenio suscrito entre el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), para la promoción, contratación y explotación por parte de la sociedad, de las obras de modernización y consolidación de esos regadíos, contempladas en la planificación del Ministerio.

Mediante esta Adenda, el Ministerio encomendó a Seiasa esas diez nuevas actuaciones. El documento financia también la ampliación del capital de la sociedad con un importe máximo de 18.000.312 euros, que se une a los 12 millones de capital disponible que posee, para la ejecución de las nuevas obras programadas por el departamento.

Las otras cinco inversiones que se acometerán fuera del territorio regional son las de la Colectividad Cuevas del Campo en Granada; las del Molinar del Flumen, las de Grañen-Flumen y Almuniente y las de El Puntal, las tres en Huesca, y las de Bélgida en Valencia.

El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación considera «una prioridad de primer orden la política de modernización de regadíos» que ejecuta de manera prácticamente exclusiva a través de la Seiasa. Se trata de una política, aseguró el Gobierno, «prioritaria, ya que incide directamente en aspectos como la lucha contra la despoblación en el medio rural y la lucha contra el cambio climático».

Las inversiones realizadas a través de Seiasa «tienen un efecto multiplicador de la inversión innegable, siendo en muchos casos cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader)», concluyó el Gobierno en una de sus últimas decisiones de legislatura.

En el caso de Castilla y León, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural continuará las inversiones previstas en el Plan Nacional de Regadíos, aprobado en 2002, que ha propiciado la transformación de 35.000 hectáreas a regables y la modernización de otras 110.000. La Administración regional recoge para la legislatura en curso el testigo y contempla actuar en 30.000 hectáreas hasta el año 2023. Así, está prevista una inversión de casi 285 millones de euros, de los que la Junta de Castilla y León responderá de 135,7.

En lo que lleva de andadura la legislatura, la Consejería ha dado pasos para avanzar en este propósito. Ejemplo de ello es la licitación de las actuaciones para el regadío de Valoria la Buena (Valladolid) en 374 hectáreas con más de tres millones. Además, según explican en el departamento liderado por Jesús Julio Carnero, está «muy próxima» la intervención en Becerril del Carpio (Palencia) que abarca 1.792 hectáreas, de las que 140 ya son regables, con cerca de 4,7 millones. También avanza el convenio entre Seiasa y la Comunidad de Regantes del Campillo de Buitrago, en Soria, con 2.619 hectáreas y más de 19,6 millones.

Para el futuro más inmediato están «puestos sobre la mesa», avanza la Consejería inversiones por un valor de casi 60 millones de euros.