Coproga recogerá en junio la primera cosecha de trigo Harmony

La cooperativa vallisoletana Coproga, perteneciente al Grupo AN, recogerá en el mes de junio la primera cosecha de trigo Harmony con la previsión de almacenar unas 690 toneladas de esta variedad potenciada por la empresa Fontaneda en su 'Compromiso Harmony' para ofrecer al consumidor "galletas de mayor calidad".

Coproga se ha sumado a este proyecto innovador al que ha dedicado 132,37 hectáreas de trigo de las que 56,15 son en secano y 76,22 en regadío.

Además y según ha informado desde Fontaneda, se han dedicado 4,58 hectáreas exclusivamente al cultivo de flores melíferas para favorecer la supervivencia de las poblaciones de abejas y mariposas y asegurar así la polinización.

La adhesión de Coproga a 'Compromiso Harmony' responde a la demanda de esta variedad de trigo por parte de Fontaneda tras la inclusión de dos nuevas marcas, 'Osito Lulú' y 'Marie Lu', a un proyecto del que ya forman parte 'La Buena María' y 'Digestive'.

En concreto, el objetivo de la galletera para 2015 es producir el 74% de sus galletas con trigo Harmony y llegar al 99% el próximo año cuando incorporará las marcas 'Belvita Desayuno' y 'Fruit & Fit'.

"Ser la primera cooperativa de la provincia de Valladolid en formar parte de un proyecto como Harmony ilusiona por igual a la cooperativa y a sus agricultores", ha asegurado el director del Área de Cereales del Grupo AN, Juan Luis Celigueta.

Según han explicado Celigueta, se trata de un sistema "innovador, exitoso, sostenible y, por tanto, con futuro" con el que se puede asegurar además "una gran cantidad de empleo" durante los próximos años, "además de una modernización de las instalaciones y del proceso de trabajo".

Para que los agricultores locales puedan proveer de trigo a Fontaneda deben cumplir con el código de buenas prácticas recogido en la 'Carta de Calidad Harmony' donde se especifica la actuación en ámbitos como el uso del agua, la gestión de residuos, el transporte y el almacenamiento de la cosecha, la fertilización y la sanidad de los cultivos o la trazabilidad desde la parcela hasta la recepción del trigo.

Esta carta se mejora y revisa cada año y ha pasado de tener 38 a 49 buenas prácticas. A su vez, la empresa externa SGS, líder mundial en inspección, verificación, análisis y certificación, efectúa auditorías aleatorias tanto a los agricultores como a las harineras.

España es el segundo país europeo, después de Francia, en el que se ha implantado esta iniciativa de agricultura sostenible, un proyecto a largo plazo que irá creciendo como lo han hecho tanto las toneladas de trigo Harmony, como el número de agricultores y cooperativas locales o las especies de mariposas y abejas que se alimentan en las hectáreas destinadas al cultivo de flores melíferas.