SANTA GLORIA (SALAMANCA-VALLADOLID)
Bocados que saben a gloria
La familia Saldaña regenta siete locales de esta cadena de repostería gourmet que mima el producto con trato exquisito
Hay negocios que desprenden desde el primer momento aromas a innovación; aventuras empresariales con grandes dosis de emprendimiento y una dulce cobertura de alma o carisma. Así ha sido el auge y crecimiento de Santa Gloria, una cadena de establecimientos de repostería y cafeterías gourmet surgidas tras la pandemia en Salamanca. Alain Saldaña, CEO de la empresa, es un hombre de negocios con una dilatada trayectoria en el mundo de la hostelería. Es propietario del Hotel Casino del Tormes y el Hostal Plaza Mayor de Salamanca.
Su olfato para adelantarse a las necesidades del cliente le llevó a embarcarse en esta cadena que nació en la plaza del Corrillo de la ciudad del Tormes. “Ha sido toda una aventura. Apostamos por algo que creemos y que nos ha demostrado el tiempo que ha sido un acierto. Después de la pandemia la gente tiene ganas de encontrarse, de verse las caras, de tomar un buen café y disfrutar de una tarde agradable.
Vimos que la plaza del Corrillo era un sitio de paso de mucha gente, abrimos a finales de 2021 el primer establecimiento. Era un modelo de negocio que no existía en Salamanca. Gracias a la buena acogida decidimos abrir en menos de un año otro más en la calle José Jaúregui y a los pocos meses llegó la tercera apertura en el centro comercial El Tormes de la ciudad. Ha sido todo un éxito”, señala Tamara, gerente en Valladolid de la empresa que atraviesa un momento de expansión y consolidación. La familia Saldaña ha tomado las riendas en Castilla y León de esta franquicia que pertenece a la compañía FoodBox, uno de los grandes grupos de restauración que está desarrollando una fuerte expansión con aperturas fuera del territorio nacional, aterrizando en Portugal y Andorra.
Y en la actualidad ya son 7 los establecimientos con el aterrizaje en Valladolid. “A día de hoy contamos con una apertura de Plaza España, otra en el centro comercial Vall Sur y también estamos presentes en el Centro Comercial Río Shopping con un local y un pequeño kiosko”.
La viabilidad del proyecto ha superado con creces las previsiones de amortización de las inversiones. “Los plazos eran a 6-7 años vista y estamos acortando los plazos a 3-4 años”.
CALIDAD COMO MÁXIMA
La fórmula del éxito es sencilla: calidad en el producto acompañada del apoyo de un gran equipo humano además de mantener una fuerte apuesta por la innovación. “Para nosotros, como empresarios, es fundamental la calidez humana, que trasladamos a los clientes con nuestro mejor servicio y atención, fomentando la empatía y la interacción con ellos y aconsejando en todo momento la mejor elección de nuestros productos. Mimamos mucho el lugar. Recibimos con una sonrisa al público, intentamos dar la máxima amabilidad, ser empáticos, aconsejar sobre los productos. Otro punto que nos diferencia es que horneamos en fresco todos los días un producto de calidad excelente. Lo horneamos y decoramos con el máximo cariño”.
Su equipo humano formado por 40 personas entre los 7 establecimientos de Salamanca y Valladolid es una de las bisagras de su negocio. “No nos fijamos en la edad. Solo que tengan ganas de trabajar e ilusión. Contamos con muchas mujeres de más de 40 años comprometidas, que se sienten parte del proyecto, responsables”.
Sus glorias son su producto estrella. Una especie de mini croissants de distintas variedades de sabor. “Vamos cambiando en función de la época del año. Las rellenamos de chocolate, de nocilla, oreo, de pistacho, bañados de chocolate blanco o con toppings. También de maracuyá o lima. Y en navidad los hacemos de Baileys. También las decoramos de manera especial como el día de la Madre. Siempre estamos innovando. Lo que nos hace diferentes es nuestro horneado diario y la cobertura en almíbar”, señala. Al éxito de sus glorias que se pueden encargar para llevar se suman las tartas de queso o de zanahorias.
Junto a ello se puede disfrutar de una larga variedad de napolitanas, pasteles de Belén o productos salados. “Somos conocidos por los desayunos y las meriendas. Tenemos tostadas de jamón, de aguacate. Y contamos con todo tipo de leche de avena, soja, almendra o sin lactosa. Intentamos adelantarnos a las necesidades y gustos del cliente. Nos adaptamos a todo, ahora en verano también tenemos tarta danesa y apostamos por las limonadas, tanto original como de coco, los smoothies 100% naturales y bebidas frías refrescantes como el té chai”.
Sus locales han sido pensados para crear ambientes acogedores, con maderas, paredes de piedra de cara vista y tonalidades neutras y naturales. Una especie de oasis del café con toque humano. “Tenemos que apostar por vernos las caras de nuevo, por tiempo de calidad, de compartir con familiares y amigos en reuniones, por desconectarnos de las tecnologías y conectarnos más a nuestra gente”.