Cerrar

SEGOVIA - LA POSTAL

El placer de comer en un antiguo tren en Segovia

Este restaurante es especial tanto por continente como por contenido. Está ubicado en un antiguo vagón de tren y tiene vistas panorámicas a Segovia

Diego Albornos se formó en los fogones de la Postal de la mano de Joni Barroso. Tras seis años de experiencia, el segoviano ha asumido la dirección culinaria de La Postal.LP

Publicado por
Henar Martín Puentes
Segovia

Creado:

Actualizado:

Pronto cumplirá un cuarto de siglo como referente de la gastronomía segoviana. La Postal es un lugar con un encanto especial. Parte de esa magia se debe a su ubicación, en Zamarramala, desde donde se divisa una increíble panorámica de la ciudad del Acueducto y la Sierra de Guadarrama. Abrió sus puertas en el año 2000. «Era una antigua nave de vacas, de ganado. Los dueños vivían en la zona y siempre pensaban -estas vacas son las que mejores vistas tienen de Segovia- poco después tuvieron la oportunidad de reformarlo y convertirlo en restaurante», explica Ana Martín, responsable de eventos y comunicación.

Y es que Segovia merece al menos una visita cada cierto tiempo para contemplarla. Disfrutarla desde diferentes perspectivas. Y una de ellas es desde el restaurante la Postal. Abrió sus puertas en el año 2000 y desde entonces el lugar ha sido un reducto de paz. Un lugar donde se puede disfrutar de la cocina segoviana de verdad, aquella en la que se respira el horno de leña, con sus asados, los garbanzos de Valseca y por supuesto, los famosos judiones de la Granja.

El lugar dispone de distintos espacios. Un comedor amplio con amplios ventanales y un jardín con capacidad para atender a más de 200 personas que sirve para celebraciones y eventos.

Pero el principal atractivo o reclamo es un antiguo vagón de tren de los años cincuenta que se adaptó como comedor. «Margaret y Antonio Misis, los propietarios, lo habían visto en Estados Unidos. Ella es de Chicago y habían visto allí vagones reconvertidos y pensaron -por qué no lo hacemos aquí-. Después de buscar por toda España localizaron este vagón que pesa 60 toneladas y mide 22 metros de largo. Viene de Granada y las vías de Alicante», relata.

Homenaje a Machado

Su vagón restaurante fue bautizado con el nombre ‘Antonio Machado’. «El vagón recrea el pasado del escritor del 98 ya que fueron innumerables los viajes que realizó en tren para ver a su amada Pilar Valderrama a Madrid, más conocida como Guiomar. El tren fue lugar de inspiración y el lugar escogido para escribir parte de su obra». En este tiempo La Postal se ha convertido en un lugar único y exclusivo para celebrar una ocasión especial. Desde las ventanas se puede disfrutar del paisaje que encandiló a Machado. «Llama mucho la atención al visitante por la originalidad del sitio y por la belleza de las vistas. Se divisa la catedral, el Alcázar, la Sierra. Es todo un reclamo turístico y gastronómico. En fechas puntuales como San Pedro o San Valentín es difícil encontrar hueco». También ofrecen la posibilidad de reservarlo al completo para celebraciones particulares.

El vagón tiene capacidad para atender a 54 comensales. Entre sus especialidades culinarias además de los platos típicos como el cordero o el cochinillo asado en su horno de leña, destacan platos como el tartar de solomillo de buey con su aliño en pan bao frito y yema de codorniz o Pez San Pedro a la plancha con risotto de almendra y langostino, alioli de verdejo y espagueti de mar o el cochinillo crujiente confitado en leche, parmentier, manzana ácida y maracuyá. La mayoría de los platos están elaborados con productos de la zona como el cordero de Sacramenia, el cochinillo de Segovia, las patatas de la huerta segoviana o los puerros ecológicos del Carracillo. El restaurante trabaja con productos de Alimentos de Segovia y Tierra de Sabor siendo un abanderado de la despensa segoviana. «Tocamos una cocina que une tradición y vanguardia con una apuesta fuerte por el producto de Km 0. En nuestra carta conviven platos innovadores y asados tradicionales». El cochifrito, el cordero a la miel o el tartar de solomillo guardan equilibro con guiso de thai. Su cocina se inspira en otras culturas internacionales con un toque de sofisticación. «Mezclamos. Ofrecemos también picadillo de la matanza, paté casero. Intentamos adaptarnos a los nuevos tiempos. Tenemos un apartado de platos sin gluten y platos vegetarianos».

El chef Diego Albornos dirige el equipo de cocina donde la excelencia se respira desde la comida al servicio. «Durante toda su trayectoria ha ido formándose con nosotros, teniendo una gran pasión por la cocina y ganas de investigar técnicas culinarias nuevas». La Postal no deja de evolucionar, con nuevas técnicas y combinación de sabores. Siempre preservando la tradición.

FICHA

DIRECCIÓN: C/ Sacramento, 22, 40196 Zamarramala, Segovia
TELÉFONO: 921 120 329
WEB: www.restaurantelapostal.com
CAPACIDAD: amplio comedor para 220 personas. Vagón con capacidad para 54 comensales.
CIERRE: ningún día
COCINA: castellana actualizada. Especialidad: cochinillo Marca de Garantía o los famosos judiones de la Granja.
PRECIO MEDIO: 45–50 euros a la carta. También Ofrecen menús degustación.
JEFE DE COCINA: Diego Albornos