Revuelto de polifenoles
La paradoja del vino
Atauta, que está en Soria y dentro del ámbito geográfico de la Denominación de Origen Ribera del Duero está considerado hoy como uno de los ejemplos arquitectura popular del vino más interesantes y valiosos debido a la configuración del barrio de lagares y bodegas y a su buen estado de conservación. Atauta es una pedanía de San Esteban de Gormaz y los pocos habitantes del pueblo se dedican a la ganadería y agricultura. Y aquí se ha dado la paradoja del vino, pero no en su acepción más conocida relacionada con el consumo de vino en zonas productoras rurales y el descenso de enfermedades cardiovasculares.
Se trata de otros valores, ya que del abandono se ha pasado a una resurrección que garantiza futuro en las zonas gracias los vinos de calidad. En el caso de Atauta, por doble partida. Primero porque gracias a la cooperativa de San Esteban, los últimos majuelos no se desceparon y cundo llegó la nueva era del vino de calidad, ahí estaban para responder con su cepas, casi centenarias, a la elaboración de vinos selectivos y con criterios de suelos y terruños y pequeños majuelos que catapultaron a este pueblo soriano de la Ribera del Duero.
Pero la paradoja es que el pasado y el futuro se dan la mano en una empresa colectiva que está generando riqueza en este ámbito rural, por una parte el trabajo de las viñas viejas y nuevas plantaciones y los puestos que generan las dos bodegas existentes y, ahora, todo el fenómeno etnográfico y turístico de la puesta en valor de su paisaje cultural y de la arquitectura popular. Con visitas a los lagares tradicionales que ya forman parte de los destinos de la Ruta del Vino de la Ribera del Duero y uno de los referentes de enoturismo en Castilla y León.