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FINCA MARADELA (TORO, ZAMORA)

Celebraciones con alma en el campo

El grupo hostelero Sancho 2 ofrece un espacio idílico para todo tipo de eventos en un paraje cargado de historia

Ambiente de una celebración de boda que se organizan en este entorno idílico cagado de historia, naturaleza y romanticismo. Un equipo de profesionales cuidan hasta del más mínimo detalle.-L. P.

Publicado por
Henar Martín Puentes

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En algún momento de la vida se producen acontecimientos únicos, celebraciones especiales que queremos compartir con la familia y amigos y en los que no queremos que falle nada, ni el más mínimo detalle. Para ello es indispensable depositar la confianza en auténticos profesionales que hagan de ése día algo especial.

El grupo hostelero zamorano Sancho 2, con más de 40 años de trayectoria, ha incorporado para sus clientes un nuevo espacio diferente en la provincia zamorana lleno de encanto y magia. Se trata de Finca Maradela, un lugar en mitad de la naturaleza, que no deja indiferente a nadie. «Se encuentra ubicada en el Monte San Miguel de Grox donde tuvo lugar la famosa Batalla de Toro, fue poseedora de un Monasterio en el siglo XII, albergó un Palacio, viñedos, olivos y una extensa variedad de árboles frutales que aún hoy en día engalanan sus bellos rincones», comenta Silvia Rodríguez, Directora Comercial de la firma de restauración. Ella se ocupa personalmente de orientar a los clientes, generalmente novios que están organizando su boda, para que todos los detalles de este gran día sean acertados.

Desde que se puso en marcha el proyecto sus promotores no dudaron en bautizarlo con un nombre evocador: «el lugar donde nacen los sueños». Motivos no le faltan al espacio pues, junto a su historia el paraje, inmerso entre árboles centenarios, esconde múltiples rincones como la Encina del Beso, con más de 500 años de antigüedad que por sí sola y a través de sus extensas ramas forma un enorme corazón, o una fuente italiana del Siglo XV llamada la Fuente de los Deseos.

«Finca Maradela posee tres fuentes de gran importancia catalogadas históricamente y esta es una de ellas», relata Rodríguez. Todo ello traslada al visitante a un lugar onírico donde «se fabrican todas las emociones humanas positivas», como describe la Relaciones Externas del grupo de organización de eventos. Amor, Libertad, Felicidad, así en mayúsculas, son algunas de esas sensaciones mágicas que servirán de brújula para no perderse en este espacio de celebraciones únicas donde se organizan banquetes de bodas principalmente.

AMBIENTES DIFERENCIADOS

La mayor parte del año utilizan en mayor medida las zonas exteriores –«poseemos diferentes espacios, desde extensos jardines con una capacidad para 500 comensales y en el caso de que el tiempo no acompañe disponemos de un Restaurante reminiscencia de una antigua vaquería donde se fundó la más famosa empresa láctea zamorana, además de una carpa totalmente acondicionada para dar cabida a más de 350 personas», explican. Cuentan además con una discoteca exterior de ambiente ibicenco y de un espacio para ceremonias civiles rodeado de un estanque de nenúfares. La decoración, con reminiscencias vintage, invita a fundirse en un ambiente cargado de romanticismo.

Para la comida, Finca Maradela ofrece todo tipo de soluciones y alternativas en función de las necesidades de los clientes. Nacho, el chef, ofrece distintos tipos de menús a partir de 130 euros el cubierto (IVA incluido) basado en estaciones de diferentes productos, que incluye cóctel de una hora de duración, con profesionales de coctelería en vivo y todos aquellos productos que las parejas demanden. Una cocina cuidada, en la que se realza la calidad de los productos naturales, con toques de innovación y creatividad, son las notas características.

Entre las propuestas no duden en degustar sus carnes. «El plato estrella en Maradela es el solomillo de ternera o de buey a la parrilla en vivo y a vista del cliente, comandamos el punto de la carne de cada comensal para que lo puedan degustar según sus preferencias. Elaboramos con mucho mimo cada plato cuidando hasta el último detalle», atestigua Silvia Rodríguez.

Además, Finca Maradela se ocupa del transporte, tanto de ida como de vuelta para facilitar a las parejas al máximo la organización de su boda, así como de una serie de añadidos tales como la decoración, candy bar, show de postres o el alojamiento, entre otros servicios.

Todos ellos son elementos que aportan valor añadido, ingredientes únicos de calidad donde se ha cuidado la materia prima y la excelencia del sello diferenciador de su promotor, Grupo Sancho 2.