Restaurante Paso Honroso (Hospital de Órbigo, León)
Truchas y lanzas
María Ángeles Luengo, en el Museo de la Pesca, integrado en su complejo hostelero, con una sopa de trucha y junto a una armadura, que recuerda a don Suero de Quiñones.-ARGICOMUNICACIÓN
El nombre del complejo, situado a la entrada de la población, indica que estamos en Hospital de Órbigo, escenario del célebre torneo medieval del Paso Honroso, protagonizado por don Suero de Quiñones. Este pueblo también es una referencia del mapa gastronómico de Castilla y León, al ser la cuna de la sopas de trucha. Este restaurante leonés es un torrente cultural: se identifica con un hecho histórico, e incluye en sus dependencias un Museo de la Pesca con Mosca, que habla de la estrecha relación del Órbigo con esta práctica y, por supuesto, con las truchas. Pero, además, Marigeli –así la llaman en la zona– apuesta por la sopa de trucha como especialidad local y recuerda con cariño a Consuelo Salvadores, fundadora de esta receta con casi medio siglo de historia, que consiguió meter a Hospital en el libro de la cocina española. Paso Honroso siempre ha participado en las históricas jornadas locales de la trucha.
Estas son las credenciales de un restaurante donde se puede comer el menú por diez euros –en ocasiones, compartiendo comedor con los peregrinos– eligiendo entre cuatro platos. A la carta, entre 25–30 euros. No faltan vinos leoneses (prieto picudo y mencía), ni de la región. María Ángeles Luengo lleva un cuarto de siglo ligada profesionalmente al establecimiento familiar, que adquirió su padre, Gaspar Luengo, años atrás. En la cocina, Gabriela y Simone; en sala y barra, Paola y Noelia, y Yoli, que coordina una plantilla casi completamente femenina. El entorno marca la comanda: trucha al horno o a la plancha, y siempre la sopa de trucha como plato estrella. Mucha cocina popular y el resto de la carta se ajusta a la comanda de los 80, algo que se agradece: legumbres, merluza a la plancha y romana, lechazo, bacalao al pilpil y al ajo arriero, ensaladas, parrilladas, pulpo, gambas al ajillo, mollejas y pimientos del Bierzo. Nunca faltan la cecina ni el embutido leonés.
Es este un lugar para comer haciendo el Camino de Santiago, en un alto en el viaje, o como turista y visitante de Hospital de Órbigo. Además, Paso Honroso permite conocer la cultura de la trucha y la pesca fluvial, con un museo integrado en el establecimiento, que es todo un santuario para los pescadores.