Diario de Valladolid

HIJOS DE FÉLIX SALAS (DOP CIGALES)

El color, una marca

La familia Salas Mucientes trasladó la elaboración de vino desde el barrio de bodegas a las nuevas instalaciones hace 25 años. Produce 500.000 litros de vino de los que 350.000 son de rosado. Viña Picota, su marca más conocida, cumple 26 años

Inés Salas posa con una botella de Piña Picota entre dos depósitos de elaboración.-M.T.

Inés Salas posa con una botella de Piña Picota entre dos depósitos de elaboración.-M.T.

Publicado por
MAR TORRES
Valladolid

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La bodega se llama Hijos de Félix Salas, no obstante, la mayoría de los consumidores la conocen por el nombre de uno de sus vinos: Viña Picota, un rosado afrutado acogido a la DOP Cigales, cuya primera cosecha salió al mercado hace 26 años.

El origen de esta empresa familiar, cuyas instalaciones se encuentran en Corcos del Valle (Valladolid), está en la actividad que desarrollaba Félix Salas (1922-2016), su creador, en la segunda mitad del siglo XX. Hombre de campo, Félix continuó con la elaboración de vino que sus abuelos y sus padres mantuvieron en la bodega subterránea de Corcos. Tiró de ‘pelleja’ y prensó con viga. Con su cuñado Julio Mucientes empezó a vender el ‘clarete’ en garrafones, unos 96.000 litros, hasta que en los años 70 el negocio despegó y se situó en los 300.000 litros y ampliaron las sisas.

Sin embargo, el fallecimiento de JulioMucientes obligó a Salas a reconducir la empresa y a dar paso a la familia, a su mujer Natividad Mucientes y sus hijos Isaac, Feli, Carmen e Imelda, formando así la sociedad Hijos de Félix Salas y una nueva etapa para Salas en los años 80. Porque fue a partir de entonces cuando decide comercializar el vino embotellado y construir una nueva bodega (instalaciones actuales) y forma parte del consejo fundador de la denominación de origen Cigales.

El viñedo del que se aprovisiona la bodega se extiende por una superficie de 80 hectáreas repartidas en diversas parcelas de Corcos con el común denominador de estar asentadas en suelos de cascajo.

Por variedades, la tinta tempranillo ocupa 60% de la superficie, mientras que el resto está cultivado con garnacha y las blancas verdejo y albillo.

La edad varía desde los 110–120 años de las viñas más viejas, en total unas 15 hectáreas, hasta lo último que se replantó en 2015: dos hectáreas con tempranillo.

La mayor parte de las viñas se conducen en espaldera (60%), la más vieja es de hace 24 años. Plantaciones más o menos recientes en las que el tempranillo ocupa la mitad de estas espalderas. La otra mitad corresponde a verdejo y hay algún pico de albillo y garnacha, según indica Inés Salas. «Lo más viejo es de hace unos 110–120 años, serán en total 15 hectáreas con una producción de 3.500 kilos por hectárea», señala.

Entre el 30% restante en vaso se encuentran las cepas centenarias y plantaciones realizadas hasta hace ocho años.

Aunque la plantación de viñedo se ha ido acometiendo progresivamente, fue hace 25 años cuando, tras la constitución de la empresa, se decidió aumentar la producción de vino. Félix Salas empezó a comprar parcelas en producción y a plantar vides en suelos de su propiedad que tenían otros cultivos.

Aunque varía en función de la cosecha, la producción media de vino alcanza los 500.000 litros de los que 350.000 son de rosado y el resto tinto.

La zona de elaboración dispone de depósitos de acero inoxidable de diferente tamaño, desde 50.000 a 5.000 litros. y un parque de barricas con 350 unidades, el 70% de roble americano y en resto francés,

La vendimia es manual y mecanizada, en función de la viña, y la elaboración se realiza por pagos.

El primer vino en salir al mercado fue Viña Picota, hace 26 años. A Félix no le gustaba el color cebolla de los claretes de entonces. Comenzó a elaborarlos de otra forma y a partir de ese momento se fueron imponiendo los rosados más cubiertos, en una gama cromática que se mueve entre os tonos rosa fuerte y picota.

También entonces se comercializó el tinto joven Félix Salas, recuerda Inés, y a los dos, tres, cuatro años los crianzas y reservas». «Ya hace 10, 12 años el rosado Félix salas y el Viña Perrote, ambos destinados a exportación. La diferencia entre el Viña Picota y los otros dos rosados en la cantidad de tempranillo que llevan, 85% frente al 75% del Félix Salas y el 70% del Perrote.

Al Viña Picota se destina, también , el 80% de la producción de rosado, unos 290.000 litros de los 350.000 que se han elaborado tras la vendimia de 2016. La bodega comercializa el 10% de la producción en Holanda y Alemania.

Otro área que cada vez toma más importancia en la actividad de la bodega es el del turismo, Socios de la Ruta del Vino de la DOPCigales, realizan visitas guiadas a las instalaciones, tanto las sisas y galerías subterráneas como a la bodega nueva, y han habilitado un kids wine corner, el rincón de los niños donde los más pequeños, con una monitora, pueden pintar y realizar otras actividades vinculadas al viñedo y la bodega mientras los mayores la visitan y catan los vinos. El precio de la visita es de 5 euros y es necesario realizar cita previa.

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