La Comisión Europea anuncia ayudas al almacenamiento de lácteos para compensar el veto ruso

La Comisión Europea ha anunciado este jueves ayudas de emergencia al almacenamiento privado de mantequilla, leche en polvo desnatada y ciertos quesos hasta finales de años para compensar los efectos negativos del cierre del mercado ruso a las importaciones de productos lácteos europeos.

Aunque aun no hay cifras concretas, fuentes comunitarias calculan que las ayudas estarán entre los 10 y 20 millones de euros. Una cifra que se concretará en cuanto se confirme qué tipos de quesos recibirán las ayudas.

“Los precios del mercado europeo de los lácteos ya muestran que el veto ruso está empezando a afectar al sector. En ciertos estados miembro, se están perdiendo ingresos por las exportaciones y hay que encontrar nuevos mercados”, declaró el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos.

Las exportaciones de productos lácteos europeos a Rusia se elevaron a 2.300 millones de euros en 2013, de los cuales mil millones corresponden sólo al queso. Y aunque 25 de los 28 estados miembro exportan queso a Moscú, los países más afectados por el veto serán Finlandia, Letonia y Lituania -donde el 90% de exportaciones de queso van a parar Rusia- y Alemania, Países Bajos y Polonia -donde las exportaciones a Rusia rondan el 40%. En España las exportaciones de queso a Rusia representan menos del 10% del total.

La ayuda anunciada por la Comisión Europea cubrirá el coste diario del almacenamiento privado para mantequilla y leche desnatada en polvo durante un periodo de tres a siete meses, y aun tiene que ser aprobada formalmente por los 28 la semana que viene. “El objetivo es ganar tiempo para buscar nuevos mercados donde colocar estos productos”, han explicado fuentes europeas. Bruselas, además, quiere extender estas ayudas a ciertos quesos pero para ello se requiere un acto delegado que permita poner en marcha las ayudas para situaciones de emergencia previstas en la Política Agraria Común.

Este paquete de medidas de ayuda es el tercero que Bruselas anuncia desde que Moscú decidió cerrar las fronteras a los productos agrícolas europeos -incluyendo frutas y hortalizas, carne, pescado y productos lácteos- como represalia por las sanciones comunitarias impuestas a Rusia por su injerencia en el conflicto ucraniano.

Unas ayudas, pues, que se suman a las anunciadas el 11 de agosto para el melocotón y la nectarina por valor de 32,7 millones de euros, y el día 25 para frutas y hortalizas -como manzanas, peras, tomates y pimientos, entre otros- por valor de 125 millones.