Matemático de la urología

Es el talón de Aquiles de la salud masculina. Infecciones y cáncer son dos problemas que puede presentar esta glándula, sobre todo a partir de los 50 años y, aunque con la edad aumenta la posibilidad de padecer estas afecciones, los jóvenes no están inmunizados. Conocer sus entresijos es vital para atajar una enfermedad que, en la mayoría de los casos, se sufre en silencio.

Una persona que sabe mucho de urología es Francisco Gómez Veiga. Este gallego estudió Medicina porque «me permitiría hacer una labor en la sociedad muy apropiada para ayudar a los demás», sostiene, al tiempo que añade que «me parecía atractiva en lo referente a progresión, avances, retos...».

Tras terminar sus estudios, inició su formación como residente en centros nacionales e internacionales. Ha dejado su huella en diferentes áreas de oncología o el trasplante en Seattle, Nueva York, Munich y Frankfurt (Alemania) y Goteborg (Suecia).

Gómez Veiga, que en la actualidad es jefe de servicio de Urología del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, está desarrollando varios proyectos entre los que se encuentra el estudio de incidencia y práctica clínica del cáncer de próstata en Castilla y León.

Otra de las líneas de investigación es el desarrollo de nuevos biomarcadores y modelos de biopsia para detectar el tumor. Su equipo también vigila el desarrollo de posibles marcadores de agresividad en estos cánceres, que son ‘viejos conocidos’ de este médico que nació en Santiago de Compostela.

En esta línea, señala que uno de los retos a los que se enfrentan los especialistas es, precisamente, «diferenciar los tumores de próstata que pueden ser agresivos y los que no», aunque reconoce que por el momento no existen las herramientas necesarias.

De hecho, en la actualidad se trabaja en el desarrollo de nuevos marcadores que mejoren la especificidad del PSA (el valor estandarizado en las analíticas a varones), y ya existen «varios test en investigación, no comercializados, que en un futuro próximo nos ayudarán a mejorar el diagnóstico».

En su tesis doctoral dio a conocer un modelo de cálculo de las posibilidades de sufrir un tumor y, además, comprender las probabilidades de que se trate de un cáncer agresivo. Su trabajo, que se apoyó en 3.000 casos, fue recompensado con un sobresaliente cum laude.

Y no es para menos, ya que el proceso de recogida de datos comenzó en 2002 con la meta de evitar a los pacientes tener que recurrir a la biopsia. Su método se basa en varios factores claves: el PSA, los resultados del examen clínico, y el cálculo ecográfico del volumen de próstata, explica. Con esas variables dio forma a la fórmula del cálculo de probabilidades. La tesis también permitió confirmar distintos aspectos, como tomar en cuenta valores más bajos de PSA para valorar la oportunidad de hacer una biopsia o no.

El equipo de este urólogo, además, trabaja en nuevos marcadores en diagnóstico de cáncer de vejiga superficial; ensayos clínicos con nuevas moléculas en diferentes estadios de la enfermedad de cáncer de próstata y de vejiga y ensayos clínicos para mejorar el conocimiento y abordaje del cribado para este ‘tumor masculino’ combinado con resonancia magnética.

«He trabajado en el desarrollo de múltiples moléculas en investigación clínica, algunas de ellas actualmente en el mercado así como en el desarrollo de técnicas de cirugía», apunta Gómez Veiga, que, de hecho, fue una de las piezas clave en la realización del primer trasplante renal cruzado «a tres» de la Comunidad, que se hizo el pasado mes de marzo de manera coordinada con el 12 de Octubre de Madrid y con el Virgen del Rocío de Sevilla.

Su rutina es, según su parecer, «muy cambiante», ya que depende del día de la semana. Hay jornadas de sesiones clínicas, consultas, quirófanos, docencia, reuniones, congresos, supervisión de proyectos, gestión de servicio...

Para Francisco Gómez Veiga, la investigación y la innovación en Castilla y León es «mejorable». Eso sí, indica que los tiempos no acompañan: «Existen convocatorias competitivas para ayudar en cierta medida, pero es necesario un mayor esfuerzo; hay gentes y talento que deben ser aprovechados».

En este sentido, el jefe del servicio de Urología del Complejo Asistencial de Salamanca considera que las Administraciones Públicas trabajan para que la Comunidad sea puntera en el campo de la medicina, pero «todavía hay un largo recorrido». «Podemos mejorar la eficiencia pero, además, necesitamos inversiones en tecnología», manifiesta.

Opina que la sociedad no premia la innovación y el talento. «Es un punto caliente», puntualiza y pone un ejemplo: «Todo el mundo conoce a Cristiano Ronaldo o Messi, pero si preguntamos por los últimos premios Nobel... casi nadie sabe quiénes son».