¿Alguna vez te has parado a pensar que cada vez llevamos menos dinero en efectivo en la cartera? Antiguamente, salir a la calle sin dinero suelto, sin monedas o billetes, podía ser una auténtica locura. A día de hoy, sin embargo, cada vez es menos frecuente ver a las personas con carteras llenas, y mucho menos entre el público más joven. ¿Es por una pérdida de poder adquisitivo? Para nada. Es por la tecnología. Porque, sí, las nuevas tecnologías están haciendo que nuestro acercamiento a las finanzas y a la economía en general sean muy distintos a como podían serlo hace tan solo una década. Tenemos a nuestra disposición una serie de soluciones y de mecanismos que hacen que pagar en cualquier parte, o cobrar, sea un proceso mucho más sencillo, pero también mucho más seguro.