‘Casting’ para el lateral

Cuando se deambula por la cornisa de un tercer piso sin que medie un fuego u otro tipo de catástrofe, es mejor meterse otra vez en casa que tirarse desde allí y correr el riesgo de romperse la crisma, si no hay nada en el suelo que amortigüe el batacazo.

Domingo Catoira es la prueba viva de esta actitud suicida, en sentido virtual. Durante su rueda de prensa para comentar el cierre del mercado, dejó una frase para la posteridad. No se la creía ni él, pero la pronunció, cayendo (esta vez sí) en el ridículo y dejándola como otro de los memes de una temporada que apunta a récord en este apartado. «No tener lateral izquierdo es premeditado», dijo. Y se quedó tan cojonudo.

Este Real Valladolid al que a la premeditación se le pueden añadir alevosía y nocturnidad como agravantes del delito de lesa confección de plantilla, se encuentra ante una encrucijada. No hay lateral izquierdo premeditadamente, pero Lucas Rosa no estará en Vitoria. Y no cuenta con un relevo definido.

El brasileño ha visto cinco tarjetas amarillas en estos nueve partidos, de forma que en Mendizorroza vivirá uno de sanción. ¿Y quién jugará? El vacío en el lateral izquierdo se debe a la falta de dinero, lo que repercute en el límite salarial. No era premeditado y, mucho menos, meditado. Como no lo ha sido la confección de la plantilla en general.

Pezzolano no está sabiendo sacar todo el partido de una plantilla carente de automatismos y juego colectivo, pero en el club le están convirtiendo en un MacGyver. Con un clip y una pinza para la ropa le piden que construya un lanzallamas.

Al uruguayo se le abren tres posibilidades principales para suplir al brasileño: Chasco, Torres y Anuar.

La opción de Chasco, con ficha del filial, es la más natural, pues se trata de un lateral izquierdo zurdo, pero para el club es la típica alternativa bienqueda para decir que sí hay suplente de Rosa. Lo hay si juega cuando no está. Si no lo hace, será otro jugador privado de labrarse su futuro con minutos, como ocurrió el año pasado con Garri en la misma demarcación.

La opción de Anuar es la recurrente cuando hay una baja difícil de cubrir. El ceutí es el comodín del equipo y en cualquier demarcación da lucha, trabajo físico y aportación en defensa y ataque, pero en Primera hacen falta especialistas. Y a quien juegue le espera una patata caliente como es Carlos Vicente, el extremo diestro que ya sufrió el Pucela el año pasado en el Racing de Ferrol.

En el reciente amistoso ante el Leganés, teóricamente Anuar fue el lateral izquierdo de una defensa de cinco, pero en realidad fue más extremo o, a veces, interior. Pareció un ensayo de cara al choque de Vitoria.

Torres, el más volcado en la primera parte de Butarque en el costado zurdo defensivo, es la otra opción clara para el puesto. Ya ha jugado allí y sabe desenvolverse en la zona, aunque le falta la explosividad inherente a los laterales, tanto para el repliegue como para el ataque. Su gran virtud es la disciplina, pero el problema para que juegue en el costado es la carencia de centrales.

Con Javi Sánchez como duda, pues siempre se prolongan sus bajas respecto a lo previsto, y Cenk fuera por motivos físicos, Torres podría ser lateral si Cömert está para jugar. No lo hizo en el partido de Suiza ante Serbia de la Liga de las Naciones. El martes le espera otra cita en el partido de los helvéticos ante Dinamarca.

En el caso de que el Cömert fuese central y Torres lateral, Pezzolano no contaría con repuestos para el eje de la zaga. No sería de todos modo una situación nueva para el uruguayo, que ya utilizó a Juric de central en Balaídos, siendo un rotundo fracaso, pues el croata no tiene los movimientos ni la percepción del juego propias de un central. Hay mediocentros defensivos capaces de cumplir en ambos puestos; otros, no.

Con su baja, Rosa se apea de la lista de nueve jugadores de campo que han disputado todos los minutos de Liga, como consta en un reportaje realizado por Europa Press. Todos son defensas y siete centrales. Entre ellos figura... Boyomo. Disputó tres partidos con el Real Valladolid y desde que llegó a Osasuna ha sido titular e inamovible en los seis restantes. Una salida premeditada.