La portería, nuevo quebradero de cabeza para el Real Valladolid

La portería se ha convertido en todo un quebradero de cabeza para el Real Valladolid. Después de sofocar parte del alivio de no contar con un lateral izquierdo con el acuerdo alcanzado con el GD Estoril Praia portugués para hacerse con el fichaje del internacional sub-21 Tiago Araújo, que viajará este lunes a Valladolid para pasar el reconocimiento médico y estampar su firma en las oficinas de Zorrilla, el club blanquivioleta tiene otro frente abierto que cerrar con suma urgencia. Por unos motivos u otros la portería se ha convertido casi sin querer en un auténtico quebradero de cabeza. 

Si en pasadas fechas se oficializó la ‘no continuidad’ del hasta ahora capitán Jordi Masip, que quería continuar en el equipo un año más, y la continuidad obligada y por contrato de André Ferreira, tras ejercer la cláusula de compra obligatoria al Granada (con el pago de un millón), club que le cedió en el pasado mercado de invierno, la ‘rebelión’ del canterano Álvaro Aceves tras su regreso de la cesión en las filas del Eldense de Segunda, abre la caja de Pandora en el club tras negarse a entrenar. Y todo porque el Real Valladolid le quiere mantener ficha del filial mientras el portero, su agencia, mantiene que en su última renovación era portero del primer equipo a todos los efectos y si no quedaría libre para firmar por otro equipo.

Sin porteros, solo con André Ferreira en nómina y con Aceves a la espera de una resolución que podría acabar en los juzgados, la dirección deportiva del club se ve obligada a rastrear el mercado en busca de un portero de garantías. Porque Ferreira tampoco convence del todo a Pezzolano y como muestra basta el botón de la pasada campaña donde no llegó ni siquiera a debutar. Y para más inri Ferreira está sancionado y no podrá jugar la primera jornada. El lío está montado y la urgencia llama a la puerta del Real Valladolid, esta vez en la portería.

Con este panorama ha puesto sus ojos en el portero del Atlético de Madrid, Horațiu Moldovan, tentado también por Getafe, Rayo Vallecano, Celtic, Hamburgo y Ferencvaros, y que el club blanquivioleta querría en condición de cedido, incluso con un compromiso de compra obligatoria si se cumplen unos parámetros. Un deseo trasladado también a las oficinas del Mallorca con el experimentado Leo Román, pero que chocan frontalmente con los del club bermellón deseosos de una venta, acercada ya al Genoa italiano con una presunta oferta de 4 millones +2,5 en variables. El lío está montado con un casting que se traslada a otros nombres como el también rumano del Inter de Milán Ionut Radu, cedido la pasada campaña en el Bournemouth inglés.