BALONCESTO
Renace el UEMC RVB
Pone fin a su racha de cuatro derrotas consecutivas con un triunfo ante el Cantabria trabajado en defensa y con chispazos en ataque en los momentos clave
El UEMC Real Valladolid se rebeló a su adquirida condición de máquina de perder y puso fin a su racha de cuatro derrotas consecutivas, con un trabajado triunfo en Torrelavega ante el Cantabria. Esa victoria de Alicante ya no es la única luz que alumbra a los de Lolo Encinas, quienes deben encontrar con su fulgor el camino de la victoria, por encima de la zancadilla que suponen las bajas.
Lo más difícil está hecho: romper la mala racha, aunque sea a costa de un Cantabria que llegaba con la misma tarjeta de 1-4 en victorias y derrotas. Ahora se trata de aproximarse a lo que se espera con el nuevo entrenador: un baloncesto dinámico, vistoso y atractivo. Algo se pudo vislumbrar al final, cuando el UEMC RVB supo dar la vuelta al marcador y por fin aguantar un final de partido sin que el triunfo se fuese por el sumidero, como ya parecía tradición.
Al baloncesto le pasa a veces como al boxeo. Casi todo el combate puede ser un aburrimiento por el tacticismo y los fallos al tirar los golpes, pero cuando llegan los minutos decisivos se desencadena el ataque sin cuartel. Eso les pasó a Cantabria y Real Valladolid. La primera parte y el comienzo del tercer cuarto fueron casi para tirarlos a la papelera: una sucesión de fallos en defensa, pases y tiros. El retornado Vucetic sujetó a los pucelanos con su clarividencia de cara al aro (13 de sus 15 puntos en la primera mitad). Es lento, pero efectivo. El problema residió en la errática dirección de juego y el pésimo porcentaje de acierto. El UEMC RVB acabó con 14 de 37 tiros de dos (37,8%) y eso que al final se decoró el porcentaje. La defensa se entonó mucho respecto a partidos anteriores y acabó siendo buena.
El UEMC se puso 11-12 gracias al acierto anotador de Vucetic y Hoover pero Cantabría comenzó el festival del triple, logrando posiciones fáciles de tiro, para acabar el primer cuarto 22-18.
En el segundo los pucelanos ya no fueron tan estáticos en ataque. Sus movimientos para sacudirse la defensa individual y la rápida circulación de balón les propiciaron tiros fáciles... pero estaban negados de cara a canasta y en el último pase. A menos de dos minutos para el descanso, el UEMC llevaba 8 puntos y estaba cerca del colapso. Con un poco más de acierto que su rival, Cantabria se fue al vestuario con 35-29.
El tercer cuarto comenzó en la misma línea. Hasta casi el tercer minuto no se movió el marcador. Littleson rompió la sequía con un triple. Pero ese 35-29 no dolió, porque enseguida Kovacevic contestó con otro. El 35-32 fue la piedra angular para ganar el partido.
Del bostezo se pasó a la emoción, surgiendo el propio Kovacevic y Puidet en el perímetro, más Rozitis en la pintura, para teñir el choque de blanco y violeta. Aunque con problemas. Cantabria se puso 44-37 con un parcial, de 5-0, contestado inmediatamente por los pucelanos con otro de 0-8 para el 44-45, culminado con un triple de Kovacevic. Ya no se pondrían por delante los locales, lastrados por sus tiros libres (13 de 24).
El último cuarto comenzó con 47-51 y el Cantabria se acercaba, pero no podía dar la vuelta al marcador. Atencia hizo una excelente e inteligente lectura del juego, secundado por los tiradores y por Rozitis. Littleson asustó con tres tiros libre metidos a menos de dos minutos (68-71) pero Atencia contestó con otros dos y esos cinco puntos de diferencia ya fueron un seguro de vida, gracias a una excelente defensa.
FICHA TÉCNICA
68 – Grupo Alega Cantabria: Germán Martínez (2), Spencer Littleson (15), Romaric Belemene (9), Mirza Bulic (14), Garmine Kande Kieli (4) -quinteto inicial-. También jugaron: Vlad Voytso (0), Javi Vega (10), Herve Kabasele (2), Nikola Rakocevic (10) y Bennet Hundt (2).
73 – UEMC Real Valladolid Baloncesto: Agustí Sans (0), Nathan Hoover (7), Juan García-Abril (3), Amanze Egekeze (0), Vasilije Vučetić (15) -quinteto inicial-. También jugaron: Hansel Atencia (8), Jaan Puidet (7), Dāvis Rozītis (14), Maj Kovačevič (13) y Sergio de la Fuente (6).
Parciales: 22-18, 13-11 (35-29), 12-22 (47-51) y 21-22 (68-73 final).
Árbitros: López Herrada, Franquesa Vázquez y Alejo Sánchez.
Incidencias: Partido correspondiente a la sexta jornada de la Primera FEB, disputado en el Pabellón Vicente Trueba ante 1.760 espectadores.