BALONMANO
Verbena defensiva del Recoletas
Cae por 42-36 ante un Granollers al que fue incapaz de parar
Si un estadounidense o un australiano, provenientes de países donde el balonmano es como aquí el cricket, se hubiesen dejado caer de casualidad por Granollers, habrían pensado qué divertido es este deporte.
Desde su punto de vista, como neófitos, consistiría en que un equipo ataca y el otro le hace pasillo hasta el último instante, en el que un jugador rival ya se le ha ido y el defensor intenta forzar golpe franco o penalti. Gana el mejor ofensivamente.
El problema es que el balonmano no es eso. Y el agujero concreto del Recoletas es que el equipo rocoso, agresivo, con el ojo inyectado en sangre que se vio la pasada temporada en su área hasta la crisis en la portería, ya no existe. Se ha evaporado. Los cambios en la plantilla han transformado la lija en terciopelo y será obligado logra al menos que el tejido raspe para no estar pensando en la salvación hasta última hora. El Granollers ganó por 42-36 pero a los 26 minutos ya había logrado 40 goles y levantó el pie del acelerador. Si hubiese necesitado más, los habría marcado.
De hecho el partido hizo una continua goma desde que se pasó de la ventaja inicial pucelana, con buen juego al pivote y precisas penetraciones a seis metros, hasta que los vallesanos dieron la vuelta al calcetín para especular con sus crecientes diferencias. Del 0-2 y el 3-4 se pasó al 7-5 y al 14-10. Los seis definitivos fueron la máxima distancia. Al descanso se llegó con 18-14 y el Recoletas hizo soñar con la remontada cuando con dos goles de Pisonero, el mejor en ataque junto a Oliveira, se puso 18-16.
Un espejismo. Cada vez que el Granollers olía el peligro, metía el turbo con un juego rápido y coral que se le atravesó al Atlético. Con 23-17 antes del minuto 45 ya había entregado la cuchara. 34 goles le marcó Cangas, 38 Nava y 26, que no son pocos, Guadalajara. O con el asfalto de la autopista se construye una muralla, o el enemigo tomará la plaza.
FICHA TÉCNICA
BM Granollers (18+24): Roberto Rodríguez (1, Panitti), Deumal (4), Antonio García (6,1p), Rey, Romero (4), Moyano (1) y Urdangarín (2,1p); Marc Vega (1), Guillem Vega (4), Abrahao (2), Freitas (1), Montoya (2), Valera (2), Castillo (8) y Domingo (4).
Recoletas Atlético Valladolid (14+22): Bar (Forns), Manu García, Miguel Martínez (5), Karapalevski (1), Álvaro Martínez (2,1p), Calle (4) y Camino (1); Gustavo Oliveira (5,1p), Pisonero (6), Mohamed, Pedro Antonio Martínez, Dimitrioski (5,2p), Herrero, Ferreira (3) y Toledo (4).
Árbitros: Tania Rodríguez y Lorena García.
Exclusiones: Mohamed, Ferreira, Gustavo Oliveira, Herrero y Pisonero por el Recoletas Atlético Valladolid y Castillo (2) y Moyano por el Fraikin BM Granollers.
Parciales: 3-3, 6-4, 10-8, 12-10, 15-12, 18-14 -descanso-; 24-18, 27-23, 31-26, 34-29, 38-33 y 42-36-final.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la cuarta jornada de la Liga Plenitude Asobal en el Palau d’Esports de Granollers ante 600 espectadores.