Polti Kometa domina de principio a fin la Vuelta Júnior a Valladolid

No hubo sorpresa en la última etapa de la XXXII Vuelta Júnior a Valladolid y eso que el líder Iván Loaisa tuvo que sufrir de lo lindo en la tercera etapa que partía de la ciudad de Valladolid y acababa en lo alto del barrio de Parquesol. El dominio del Polti Kometa de la Fundación Alberto Contador que decantó prácticamente la vuelta el viernes en una etapa de locura tenía su continuidad el resto de los días hasta cruzar la última línea de meta. La fuga de tres ciclistas, que no eran un peligro para la clasificación general, marcó la tercera y última etapa en la que el líder se vio afectado por una caída junto a su compañero Íker Díaz, pero ambos lograron solucionarlo para reengancharse al pelotón y neturalizar la fuga del día con Nicolás Arteta del Emiko Erbi-Bembibre, José Ramón Guijarro del Ayuso TEAM UAE y el francés Mateo Sarroche del Occitanie, que coronaron en cabeza los altos de El Sombrío (kilómetro 43), La Garganta (57.1) y el Arco Portillo (73.9). Neutralizada la fuga todo iba encaminado a una volata, pero los nervios y el fuerte calor también provocaron nuevas caídas incluida la del tercer clasificado, del Polti Kometa, Robinson Rincón y otros cinco ciclistas implicados a los que se fijaba el tiempo de los primeros.

En la meta de Parquesol se coronaba Marcos Freire del equipo Bathco, repitiendo triunfo de etapa tras la CRI, seguido de Íker Díaz del Team Polti Kometa y del ruso Oleg Melnikov del Lucta – G. Rinya Bonillo. Hasta 24 corredores llegaban en ese primer grupo, pero sin apenas grandes diferencias con el resto, sobreviviendo en línea de meta 87 corredores. La general final era para Iván Loaisa, aventajando a su compañero de equipo Eleazar Jiménez en 25 segundos, y seguidos de Robinson Rincón a 1.31, y de Óscar Orts, mejor joven, a 2.17. El póker del equipo de Alberto Contador confirmaba el trabajo en equipo, en palabras de Isaac Cantón, director del equipo júnior: «Lo han hecho genial a diario, hay veces que sale y hay veces que no, pero había que estar ahí. A pesar de la victoria del primer día, el equipo se ha centrado en trabajar y en enseñar el oficio. Del primero al último y destacando a Iker Díaz y Hugo Pradas han trabajado muchísimo. Aportan gran tranquilidad y son ciclistas que cualquier equipo quisiera tener. Lo han hecho todos fenomenal, hemos estado de diez».