BALONCESTO / LEB-ORO
Paco García, más fuera que dentro
El club blanquivioleta tiene la intención de ejecutar la cláusula de rescisión del entrenador del UEMC Real Valladolid Baloncesto, al que le restaba un año, al no estar dispuesto a bajarse su actual sueldo en un 30% / El día 9 finaliza el plazo de ejecución de salida por ambas partes
Marejada a fuerte marejada en el Real Valladolid Baloncesto. ¿O tendríamos que decir en el Ciudad de Valladolid? Porque a día de hoy y en plena ebullición, a fuego lento, de la venta o no del Real Valladolid CF por parte de su propietario Ronaldo Nazario y con el convenio con la sección de baloncesto, independiente por otra parte, sin firmar, la incertidumbre es tremenda. Y prueba de ello es que los actuales rectores del baloncesto intentan, como es lógico, trabajar en dos escenarios diferentes, si continua el Real Valladolid CF con ellos o si no lo hacen.
Pero lo cierto es que los caminares del baloncesto están descompasados. Por una parte trabajan los anteriores mandatarios hasta la aparición del club de fútbol con su presidente Lorenzo Alonso a la cabeza. Y por otra el director general del real Valladolid Baloncesto, cuyo sueldo lo paga íntegramente el club de fútbol, Enrique Peral. Caminos diferentes, caminos que sobre el tapete de contraponen.
Y sin ese compromiso de unidad o convenio de la discordia sin firmar y con algún que otro pago pactado (pero no firmado) sin materializarse, la construcción del proyecto de la próxima temporada se inicia con fuego, con guerra.
El entrenador Paco García está en el alero. Se puede decir que a día de hoy está más fuera que dentro. El club se reunió con él para proponerle una bajada de sueldo, que no ha aceptado. Una bajada considerable alrededor del 30%, el porcentaje que asume el Real Valladolid o más bien que debería asumir el real Valladolid cuando se le firmó el aumento de sueldo y se firmó un contrato por dos temporadas. Y con un año por cumplir aunque con cláusula de salida por ambas partes, los dirigentes del baloncesto (no Enrique Peral) le han comunicado que no pueden asumir un sueldo como el que actualmente tiene, elevado, muy elevado.
¿Y qué significa? Que deben de ejecutar la cláusula de rescisión unilateral antes del día 9 de junio abonando una ‘pequeña’ indemnización. La polémica está servida y abre el gran interrogante. ¿Por qué no vale lo que antes valía? Y mientras, el Real Valladolid, mudo.