El VRAC revalida el título de campeón de Liga
Gana el campo del Burgos por 19-20 después de sobreponerse a un 11-0 y neutralizar a los locales con una gran defensa / Los de Merino sólo se pusieron en ventaja con el marcador definitivo
El VRAC Quesos Entrepinares revalida el título de Liga después de un apasionante e igualadísimo partido frente al Burgos, vecino con el que se ha repartido los títulos esta temporada. Los aurinegro han ganado la Supercopa y la Copa del Rey. Los azules, la Copa Ibérica y la Liga.
El partido acabó 19-20, mismo resultado que en la Copa, pero con el sesgo contrario. Nada hacía presagiar el marcador final tras un comienzo eléctrico y vibrante de los locales, que a los siete minutos ya ganaban 6-0 con dos castigos pasados por Carrió y a los 20 vencían por 11-0, tras el ensayo de Castiglioni.
El encuentro parecía un paseo militar para los burgaleses, pero es que el VRAC aún no había sacado su alma de campeón. El Entrepinares mejoró su defensa y su velocidad en ataque y comenzó a jugar en campo del Burgos.
En el minuto 23 los queseros estrenaron el marcador (11-5), mediante un ensayo de Moala. Taibo no transformó. No tuvo su día, pues falló otra transformación y dos tiros a palos.
Un excelente contraruck del Entrepinares acabó en una acción rápida con ensayo de Miejimolle (11-10). El campeón ya estaba allí.
El VRAC había tomado las riendas del partido ante un Burgos muy frenado por la excelente defensa azul. Aun así llegaban demasiados errores vallisoletanos que provocaban golpes, especialmente por retenidos. Uno de ellos fue aprovechado por Carrió para sumar el 14-10. Sólo dos minutos después eran los locales quienes incurrían en el mismo error para que Taibo pasase el oval, colocando el 14-13 con que el partido se fue al descanso.
El Burgos compareció tarde a la segunda parte, física y mentalmente. Hubo que esperar a su vuelta a vestuarios y se dedicó a hacer una especie de rugby control, pues en la última mitad de la primera parte se le había atragantado la defensa adelantada del VRAC.
Sin embargo llegó el segundo ensayo local, tras un fallo a palos de Taibo. Un despiste del Entrepinares en una touche corta provocó un ataque rápido burgalés que cogió desprevenida a la defensa visitante. Gramajo posó el balón más allá de la línea de marca y el 19-13 parecía poner cuesta abajo la vitoria local. Aunque Carrió falló a transformación.
Repuesto de su despiste, el VRAC continuó percutiendo, sabedor de su superioridad en las fases estáticas. Un robo de Gavidi y la posterior carrera del eterno capitán sirvió para dejar el oval en manos de Perotti, que ensayó para colocar en el minuto 21 el 19-18. Taibo, esta vez sí, transformó para poner a su equipo por primera vez por delante: 19-20.
El marcador ya no se movería pese a restar un cuarto de partido. El VRAC supo defender con acierto y en su único error que costó un castigo, Carrió envió el oval fuera de palos en el minuto 76. Era el día del Quesos Entrepinares, el del alma de campeón.