Alarma: Zigmantavicius, K.O.

Malas noticias en el UEMC Real Valladolid. Los problemas físicos sigue azotando y condicionando la normalidad del equipo de Paco García. El último en caer es el base Zigmantavicius, que cayó lesionado en un hombre tras un golpe en el último partido disputado en la cancha del líder Leyma Coruña. El base lituano, el único base puro que tenía el equipo tras el contratiempo sufrido por Mike Torres, tan solo pudo jugar once minutos antes de irse al banquillo ya de forma definitiva. Su golpe en el hombro puede tener consecuencias más graves de las previstas. Una primera ecografía ha dictaminado un problema que le podría acarrear perderse lo que resta de temporada. Zigmantavicius tiene dañado el músculo redondo menor de un hombro o lo que es lo mismo el tendón de inserción que se adhiere a la cápsula articular del hombro y luego se inserta en la carilla inferior del tubérculo mayor del húmero.

Un nuevo contratiempo que pone en jaque al UEMC Real Valladolid para los próximos partidos y que de confirmarse tras una nueva exploración mediante una resonancia magnética a Zigmantavicius volvería a dejar coja la posición de base con cuatro partidos de Liga regular todavía por disputarse más los playoffs.

Es el colmo de los colmos en una posición que en las dos últimas jornadas el UEMC Real Valladolid ha tenido que echar mano del jugador del filial Lambás, que no está en dinámica del primer equipo.

A la espera de Mike Torres, que no viajó a Coruña con el objetivo de acelerar su recuperación en Valladolid, el equipo de Paco García cruza los dedos sobre el diagnóstico definitivo sabedor de que el escolta Puidet y el propio Lambás son las únicas opciones de recambio ante esta nueva eventualidad, que vuelve a poner contra las cuerdas al equipo.