FÚTBOL / REAL VALLADOLID
Ganar fuera sin excusas
Los blanquivioleta están obligados a vencer a domicilio, después de casi cuatro meses sin conseguirlo, si optan al ascenso directo / Incógnita en la delantera y el dibujo táctico
Hoy es un buen día para que la racha del Real Valladolid sin ganar a domicilio acabe. Si quiere ascender no puede estar tanto tiempo sin sumar de a tres fuera. Lleva camino de hacer mucho daño esa fecha del 24 de noviembre de 2023 en que venció por última vez como visitante (0-1 en Huesca). Puede quedar grabada en la memoria colectiva, como el 2 de mayo o el 12 de octubre.
A estas alturas de Liga, con sólo 12 partidos por delante y seis de ellos desplazamientos, ya no se puede esperar, calcular ni elegir. Hay que ganar siempre y en todo lugar porque es justo y necesario, como indica la oración del Prefacio Litúrgico.
El reto con el que el Real Valladolid viaja a Ferrol es por tanto evidente, y es de esperar que no le atenace. De lo contrario las posibilidades de ascenso directo estarían cerca de esfumarse y habría que pensar en la promoción como mal menor. No porque no haya suficientes partidos por delante, sino por la incapacidad propia de ganar como visitante. Y eso que el Racing gallego es el mejor local de los seis rivales que visitará el Pucela hasta final de Liga. Como recordaba este diario el martes, los ferrolanos sólo han perdido una vez en A Malata, aunque llevan allí 8 empates. El Pucela debe sentirse obligado a seguir la senda del Oviedo, que ganó en la ciudad portuaria 1-3. Y además, remontando el 1-0 inicial. Una muestra de que no hay que bajar los brazos si se comienza perdiendo.
El once de Pezzolano es la misma incógnita de todas las jornadas, así como la convocatoria. Cuando el uruguayo parecía tener un equipo base, no sólo cambió ante el Zaragoza dos jugadores, además del dos sancionados (De la Hoz y Sylla) y el lesionado (Anuar), sino que varió la formación a un 4-3-3 que no dio especial resultado en juego más que la creación de algunas superioridades por la banda derecha de ataque.
Esta tarde habrá que ver si el míster charrúa conserva esta formación o bien vuelve al 4-2-3-1 o algo similar. Dependerá de lo que consensúe con su grupo de colaboradores, ya que este tipo de decisiones las toman en conjunto, a tenor también del juego del rival.
Un posible once, previendo el retorno al 4-2-3-1, ya que el último dibujo táctico parecía especialmente enfocado hacia el Zaragoza, es el compuesto por Masip en la portería; Luis Pérez, Tárrega, Boyomo y Rosa en defensa; Juric y Monchu en el mediocentro; Amath y Biuk en los extremos; Meseguer en la mediapunta y Sylla como delantero centro. Ésta es la gran duda pucelana, pues pueden jugar también en punta Marcos André y Negredo, aunque éste con menos opciones para ser titular.
De hecho cualquiera puede entrar en el equipo: De la Hoz, el recuperado Iván Sánchez, Escudero... Pezzolano quiere contar con todos. Quienes sean, han de jugar para ganar.